A partir de este año, cada 13 de noviembre Costa Rica conmemorará el Día Nacional de la Lucha contra el Grooming, con el fin de generar conciencia entre la población para erradicar esta práctica del país.
El Grooming es el delito por el cual una persona adulta intenta ganarse la confianza de un niño, niña o adolescentes para luego intentar someterlo sexualmente, a través de la utilización de cualquier dispositivo tecnológico. La palabra deriva del verbo inglés “groom”, que se refiere a conductas de “acercamiento o preparación para un fin determinado”.
En Costa Rica, esta práctica es delito desde el 2013 y es sancionada hasta con cuatro años de cárcel. En el Código Penal se identifica como “seducción o encuentros con menores por medios electrónicos”. Según la Unidad de Análisis Criminal del Organismo de Investigación Judicial, de noviembre 2019 al 31 de octubre de este año se han registrado 111 denuncias, concentrándose cerca del 75% en la provincia de San José. Solo el año pasado se recibieron 52 denuncias y en lo que llevamos de este año la cifra asciende a 55, siendo la mayoría de las víctimas mujeres.
El país ha intensificado el trabajo articulado entre las instituciones y organizaciones involucradas en temas de protección a la Niñez, en conjunto con la industria y los sectores tecnológicos para la construcción de entornos digitales más seguros.
En agosto de este año, la Comisión Nacional de Seguridad en Línea presentó oficialmente la Estrategia Nacional para la Prevención y Respuesta a la Explotación y el Abuso Sexual de Niñas, Niños y Adolescentes en Línea (EASNNAL).
Dicha comisión está liderada por el Ministerio de Ciencia, Innovación, Tecnología y Telecomunicaciones (MICITT) y la integran además el Ministerio de Educación Pública (MEP), Ministerio de Cultura y Juventud, Patronato Nacional de la Infancia (PANI), Poder Judicial, Superintendencia de Telecomunicaciones (SUTEL), Cámara de Tecnologías de Información y Telecomunicaciones (CAMTIC), la Fundación Omar Dengo (FOD) y la Fundación Paniamor.
“Es por todos y todas conocido que los entornos digitales son cada vez más utilizados por nuestros niños, niñas y adolescentes, y desde la competencia de cada una de nuestras organizaciones tenemos la obligación de garantizar que estos espacios sean seguros y puedan ser aprovechados de una forma productiva y significativa por toda la población, pero en especial por las personas menores de edad" declaró Teodoro Willink, viceministro de Telecomunicaciones.
Prevención y acompañamiento
Angélica Chinchilla, Directora de Evolución y Mercado de Telecomunicaciones del MICITT, destacó que la principal medida de prevención es el acompañamiento a los niños, niñas y adolescentes en su uso de Internet y las herramientas digitales. “Las personas adultas deben informarse sobre las páginas web, las redes sociales y las aplicaciones que usan frecuentemente niños, niñas y adolescentes; conocer con quiénes interactúan y saber qué gustos y rutinas tienen en su vida en línea”, dijo.
Ser personas precavidas con los datos que publicamos de forma voluntaria y lo que terceras personas publican de nosotros también es fundamental. En este sentido, Miguel Ángel Ramírez, Fiscal Adjunto de Cibercrimen, señaló que en gran medida, los delitos y otros abusos por medios electrónicos comienzan a partir de descuidos en la circulación de nuestra información. Por tal razón, es muy importante tener conciencia de los límites entre nuestra vida privada y nuestra vida pública y explicar con especial cuidado esta diferencia a las personas menores de edad.
Indicó además que desde la creación de la Fiscalía Adjunta de Cibercrimen en enero del 2020, se inició un programa interinstitucional con los diferentes proveedores de servicios, instituciones del sector público y privado y fuerzas policiales encaminados a conocer y atacar las diferentes modalidades criminales de los ciberdelincuentes, incluido el grooming.
¿Qué hacer?
Ante un caso de grooming es recomendable denunciar el perfil de la persona acosadora en la red. También limitar la capacidad de acción cambiando las claves de acceso, y revisar y reducir las listas de contactos de las redes sociales.
Las denuncias por este tipo de delitos pueden presentarse directamente ante el OIJ a través de la línea confidencial 800-8000-645.