- Se identificaron las principales características de las flotas comerciales que potencialmente interactúan con tortugas marinas para identificar las técnicas adecuadas de manipulación y liberación de estas especies.
- Con base en los hallazgos del estudio se diseñará un curso que será obligatorio para todos los capitanes y marinos de las flotas de pesca comercial en el país.
Aproximadamente un 99% de las tortugas marinas que se enganchan en las líneas de pesca en las aguas del Pacífico costarricense se mantienen con vida en el momento de ser encontradas Si los pescadores aplican técnicas correctas para manipularlas, su probabilidad de supervivencia aumenta una vez liberadas.
Asegurar ese porcentaje de sobrevivencia depende de que los pescadores apliquen correctamente técnicas de liberación de tortugas marinas y, para ello, se requiere contar con información clave sobre las características de las embarcaciones y los implementos de pesca que se utilizan en el país.
Para este fin, el Instituto Costarricense de Pesca y Acuicultura (INCOPESCA) realizó la investigación “Descripción de las características de la flota pequeña escala, mediana escala y avanzada del Pacífico de Costa Rica” en colaboración con el Ministerio de Ambiente y Energía (MINAE) que ha recopilado la información más reciente sobre las características de las embarcaciones de las flotas comerciales, el tipo de artes de pesca utilizadas, datos sobre captura incidental de tortugas y prácticas habituales de liberación que utilizan los pescadores.
Con los datos colectados, un equipo técnico local e internacional propondrá un programa de capacitación hecho a la medida para las particularidades de Costa Rica, para que más de 600 pescadores de seis puertos y comunidades pesqueras en el país puedan integrar en su día a día, técnicas correctas de manipulación y liberación de tortugas marinas.
Este curso será impartido por el Instituto Nacional de Aprendizaje (INA) y será requisito básico para todos los marineros y capitanes que participan de las actividades de palangre en Costa Rica, lo cual llegaría a ser un avance sustancial en la ruta hacía la pesca responsable en el país.
“La actualización de la información sobre la flota palangrera y artesanal con un perspectiva sobre cómo mitigar la interacción de tortugas marinas en actividades de pesca es clave para definir el alcance que tendrá el nuevo curso de mejores prácticas de manejo y liberación de tortugas marinas que es uno de los compromisos del país con normativa internacional y nacional. Solo a través de herramientas de investigación y capacitación es que podremos asegurar que la pesca costarricense alcance estándares de sostenibilidad y estamos enfocados en lograr esto para el bienestar de las familias que basan su economía en esta actividad”, afirmó el Ministro de Pesca y Acuicultura, Heiner Méndez Barrientos
Este estudio se ha enfocado en actualizar información existente y ampliarla haciendo muestreos directos en los puertos y comunidades. Por ejemplo, se han identificado las condiciones que ofrecen las embarcaciones de las diferentes flotas para trabajar con tortugas marinas a bordo. Se describieron cuáles embarcaciones pescan más cerca de la superficie dónde hay mayor posibilidad de interactuar con tortugas marinas, o a mayor profundidad, pues el abordaje para la liberación de tortugas en cada caso es diferente. Igualmente se ha revisado con detalle el material de la línea de anzuelos. Si éste es como una cuerda de tender ropa - que se usa en ocasiones por las embarcaciones artesanales para pescar el dorado - hay más posibilidades de que se enreden las tortugas. En cambio el estudio confirmó que el 100% de las embarcaciones comerciales de mayor tamaño - conocidas como de mediana escala y avanzada - usan una línea de nylon para realizar la pesca superficial de palangre, cuyas principales especies objetivo son atún, dorado, pez espada, marlín y tiburones.
Otro hallazgo importante ha sido identificar que el anzuelo que usan las embarcaciones que pescan dorado es tipo circular, pequeño y se oxida rápidamente. Esto es importante para definir las mejores técnicas y es probable que cause menos daño a las tortugas, debido a estas características.
La flota pesquera analizada en el estudio captura tortugas marinas de manera incidental, y los pescadores no tienen interés en dañarlas, de ahí el compromiso del sector pesquero de involucrarse en este proyecto y fortalecer sus acciones en favor de la pesca sostenible y la conservación de la especie.
“Desde el sector palangrero estamos totalmente comprometidos con acciones que permitan encontrar un equilibrio entre conservación y aprovechamiento, logrando así continuar con nuestro trabajo y solventando las necesidades socio económicas que enfrentan las familias de todos los pescadores. Mediante los talleres de liberación de tortugas y de tiburones, que se implementarán próximamente, le decimos al mundo que el equilibrio es posible. Nuestra visión es que las pesquerías se regulan y se administran pero no se eliminan y que la mejor forma poder demostrarlo es asegurando la menor afectación a especies que no son objetivo de nuestra pesca, como es el caso de las tortugas marinas”, explicó Mauricio González, Director Ejecutivo del Sector Pesquero Nacional
Según los estudios realizados a la fecha, en la flota de palangre el 83% de las tortugas marinas que se enganchan de forma incidental en la pesca de Costa Rica, son las tortugas lora.
“El impacto de la pesquería en el ecosistema y en otras especies que no son objetivo de la pesca, como las tortugas marinas, es un aspecto fundamental que debe ser atendido para la sostenibilidad de la pesquería. Las técnicas y medidas para la disminución de la captura incidental de tortugas en actividades de pesca, deben estar ajustadas a las condiciones reales de las pesquerías. Por esta razón, hemos realizado este estudio analizando los datos más actuales sobre la actividad pesquera artesanal y de palangre, para proponer técnicas adecuadas de liberación de tortugas en contexto local”, explicó Sandra Andraka, bióloga experta en temas marinos y asesora del proyecto.
La capacitación estará dirigida especialmente a la flota palangrera del Pacífico de Costa Rica, pero también a otras pesquerías cuya interacción con las tortugas marinas es menos conocida, como la pesca artesanal en el punto caliente de anidación de la tortuga laúd en las cercanías de Playa Grande. En esta zona de Guanacaste, las asociaciones de pescadores se han comprometido a generar mejores prácticas y acciones tendientes a minimizar los impactos de las pesquerías en pro de una mejor condición de los océanos y sus ecosistemas y esto lo están materializando mediante la creación de un Área Marina de Pesca Responsable en el Golfo de Papagayo, zona que se encuentra entre el Parque Nacional Marino las Baulas y el Parque Nacional Santa Rosa.
“Gracias a los resultados de la investigación realizada por INCOPESCA, permitirá a futuro, la capacitación del sector pesquero, aplicando correctamente, técnicas de liberación de tortugas marianas, coadyuvando al sector ambiental con la función primordial de ayudar a que las especies mantengan sus poblaciones en condiciones favorables, sino que también, se fortalecen las alianzas institucionales y de los sectores involucrados. Adicionalmente, se establece una participación del sector pesquero en materia de manejo y protección de estas especies, sin dejar de lado, el fortalecimiento de las destrezas, y la generación de un mayor conocimiento y sensibilización”, explicó Rafael Gutiérrez Rojas, Viceministro de Ambiente, del Ministerio de Ambiente y Energía.
Esta iniciativa forma parte del Proyecto “Mejores prácticas de manejo y liberación de tortugas marinas” en el que participan activamente pescadores de la Cámara Nacional de la Industria Palangrera (CNIP), la Cámara de Pescadores de Quepos y la Asociación de Pescadores de Palangre de Cuajiniquil (ASOPALANGRE), junto con la exportadora FRUMAR y Mar Profundo, dentro del Proyecto de Mejora Pesquera (FIP, por sus siglas en inglés) que busca la certificación de esta pesquería.
El proyecto está financiado por National Fish & Wildlife Foundation (NFWF) y la International Seafood Sustainability Foundation (ISSF), liderado por INCOPESCA, MINAE, el Sistema Nacional de Áreas de Conservación (SINAC) y el INA, con la asesoría técnica de las organizaciones SUBMON y EcoPacífico+. SUBMON y EcoPacifico+ han trabajado con las comunidades pesqueras y los gobiernos en la reducción de la captura incidental en el Océano Pacífico Oriental durante más de 15 años, estableciendo una relación de confianza con ellos en varios países de la región.