Con sangre chorotega corriendo por sus venas, las manos matambugueñas se sumergieron en arcilla para dar nuevos aires a la cerámica del Territorio de Matambú. Además, el grupo de artesanas y jóvenes de esta población aplicó parte de las habilidades aprendidas en la realización de un mural pictórico.
El proceso formativo lo tiene a cargo el Programa de Promoción Cultural de la UNED y lo desarrollan las funcionarias y artistas Olga Coronado y Noilyn Vega, junto a la socióloga Susana Campo. Las artistas confeccionaron el diseño final del mural, que los vecinos plasmaron en la pared principal de la futura sede del comité de cultural local del territorio.
Desde el mes de setiembre pasado, el pueblo de Matambú inició un proceso de capacitación para el mejoramiento de la producción artesanal en la zona. El principal objetivo de los talleres ha sido fortalecer e impulsar el uso del diseño Chorotega precolombino en la artesanía, y así lograr una conexión con la identidad indígena de este lugar.
Este proceso busca, principalmente, la vinculación de la población más joven en proyectos de mejora para su comunidad, y el embellecimiento del lugar a través de la expresión artística. La estrategia de trabajo ha surgido de las propias necesidades e inquietudes de los y las participantes, quienes valoran formas de aprendizaje aplicadas en el terreno práctico.
Revitalizo y hago
Según amplió la artista Noilyn Vega, durante estos talleres se introducen aspectos básicos sobre el diseño Chorotega, donde se abordan aspectos históricos y contextuales sobre esta cultura, además de aspectos formales, con respecto a los motivos representados en obras precolombinas. A partir de ese primer acercamiento, teórico y de intercambio de saberes, se introducen las clases de pintura y de técnicas manuales prehispánicas para la elaboración de objetos cerámicos,
“Desde el taller de técnicas manuales para cerámica, se abordan contenidos como el conocimiento de técnicas de manufactura (placas, rollos, pellizco) y acabados (pastillaje, esgrafiado, incisos, modelado). Además, se hizo la exploración de la arcilla como material para la construcción de un lenguaje artesanal propio, inspirado en la cerámica precolombina Chorotega”, explica Vega.
Durante este proceso, se ha podido constatar el interés de la población joven por la expresión artística a través del mural, por lo que se les invita a ellos y demás participantes de los talleres, a colaborar en la elaboración de un mural pictórico, en el espacio que pertenece a la Asociación de Desarrollo Integral de Matambú, y se pretende que próximamente sea la sede del Comité de cultura.
Se estima que este proceso en su primera etapa, concluirá en diciembre del presente año. Asimismo, se espera trabajar en una obra de arte comunitaria que refleje el sentir y la identidad del Territorio de Matambú.
Por: Martha V. Herrera Pérez