Las guacamayas rojas que han sido reintroducidas por El Proyecto Ara se han dispersado a nuevas áreas. Desde su “hogar”, Punta Islita, ahora están volando tan lejos al oeste como Playa Carrillo y hacia sureste como San Francisco de Coyote.
Estas noticias son fantásticas porque hasta hace poco ¡se encontraban extintas en el área! La guacamaya o lapa roja es una especie en peligro, debido principalmente al robo ilegal de nidos.
En Costa Rica, se estima que hay solamente 2000 en la naturaleza. Pero en la Península de Nicoya se están recuperando lentamente. El Proyecto Ara es una organización de conservación sin fines de lucro ubicada en Punta Islita. Su misión es “Implementar acciones de conservación que restauren poblaciones saludables de loros nativos a lo largo de sus rangos históricos en Costa Rica.”
La organización cría guacamayas para liberarlas en lugares donde se ha extinguido. Y donde el bosque es joven, se da apoyo a las aves liberadas proporcionando nidos artificiales para que puedan reproducirse.
La liberación de 37 guacamayas rojas en Punta Islita se ha convertido ahora en una población ¡fuerte y exitosa! Desde el comienzo del 2017, las aves se han avistado más lejos que nunca, lo que ha causado que la comunidad comparta muchas publicaciones de alegría y emoción en las redes sociales.
El gobierno de Costa Rica ha hecho ilegal la extracción de guacamayas rojas, así como de cualquier otra fauna silvestre, de la naturaleza. ¿Y no es ahí a donde los animales pertenecen? Juntos podemos ayudar a las guacamayas a recuperarse de la extinción en la Península de Nicoya, ¡hagamos de Costa Rica un ejemplo para el resto del mundo! Mostremos a todo el mundo que no lo aceptamos más y apuntamos a un país donde toda la fauna sea libre. ¡Estos animales salvajes no nos pertenecen, pertenecen a la naturaleza!