- Distanciamiento y uso de mascarilla efectivos en cortar el contagio.
- País avanza en inmunizar a la población, pero nos faltan 2.5 millones de personas que proteger con primera dosis.
- El virus Delta es más contagioso, pero sigue siendo débil si somos estrictos en las normas de higiene.
El temor invadió a muchas personas con la confirmación de que en Costa Rica circula la variante Delta del SARS-CoV-2, sin embargo, los especialistas de la Caja Costarricense de Seguro Social le recuerdan a la población que este sucumbe ante el correcto lavado de manos con agua y jabón.
Tanto el lavado de manos como el protocolo de tosido y estornudo deben ser parte de nuestra norma de vida que en esta pandemia deben cumplirse de manera estricta.
Y si a esto se le suman las otras medidas personales no farmacológicas que han recomendado las autoridades de salud durante esta pandemia como son el distanciamiento y el uso de la mascarilla, tenemos el arsenal completo para cortar la transmisión, lo cual es de bajo costo y fácil de aplicar.
También se mantiene la recomendación de evitar sitos con aglomeraciones y que los lugares donde las personas viven laboran o socializan estén ventilados.
Los científicos han evidenciado que esta variante Delta tiene alto potencial de contagio y que en otros países genera importantes brotes, con gran cantidad de enfermos y personas que requieren de atención hospitalaria.
Sin embargo, ante este panorama tenemos la certeza de cómo las personas nos podemos proteger y es seguir manteniendo la guardia, ese escudo protector que nos brinda este arsenal de prevención, al cual se ha sumado el esfuerzo del país en avanzar en la inmunización de las personas contra covid-19.
La CCSS está avanzando en las coberturas de vacunación en las poblaciones, se comenzó con los más vulnerables y ahora se está inoculando a los grupos etarios más jóvenes sin factores de riesgo, lo cual siempre está sujeto a la disponibilidad de dosis. La esperanza es que en las siguientes semanas ingresarán más dosis para continuar en el ritmo de esta última semana, pero faltan al menos 2.5 millones de personas que reciban la primera dosis.
La doctora Guiselle Guzmán Saborío, epidemióloga y jefe del área de salud colectiva reconoció que es esperable el temor de las personas ante el ingreso de esta variante Delta, de la cual semanas atrás la misma Caja advirtió del riesgo de ingreso al país, sin embargo, fue enfática en que es el comportamiento de las personas lo que contribuye en el contagio y a que el virus se disemine. “Todos sabemos qué hacer para cuidarnos y cuidar a nuestras familias, compañeros de trabajo, vecinos, amigos, por lo cual ese temor debe convertirse en una actitud y práctica responsable”.
La especialista insistió en que aún las personas que han sido vacunadas contra la covid-19 deben aplicar de manera estricta todas las medidas de prevención sanitarias. Y recordó a las personas que tienen cita para la segunda dosis, acudir puntualmente ya que proporciona una buena protección contra la variante Delta.
La evidencia disponible advierte…
Guzmán Saborío indicó que según la evidencia disponible la variante (VOC) del SARS-CoV-2 Delta (B.1.617.2) es un 40 a 60% más contagiosa y puede estar asociada con mayor riesgo de hospitalización.
Según las estimaciones, la variante Delta será la responsable del 70% de las nuevas infecciones por SARS-CoV-2.
Los grupos de mayor edad y aquellos que padecen enfermedades crónicas, tienen más probabilidades de ser hospitalizados o morir debido a la covid-19.
Sin embargo, en un escenario donde se reduzcan las medidas de restricción, se espera que la incidencia del SARS-CoV-2 aumente en todos los grupos de edad, con la mayor incidencia en los menores de 50 años, con un aumento asociado de las hospitalizaciones y muertes, alcanzando potencialmente los mismos niveles de la tercera ola, si no se toman medidas adicionales.
Lo que se conoce con la evidencia acumulada es que desde el primer informe de evaluación de amenazas sobre la aparición de la variante delta del SARS-CoV-2 en la India, publicado el 11 de mayo de 2021, se identificó como una variante de preocupación y en el transcurso ha aumentado la evaluación del riesgo de infección para personas no vacunadas y parcialmente vacunadas.
Para los grupos completamente vacunadas se considera que el riesgo es bajo.
Opciones de respuesta
Para la epidemióloga ante esta nueva variante presente en el país se mantienen las mismas opciones de respuesta que se han venido recomendando y aplicando.
Guzmán Saborío recomienda mantener las medidas a un nivel suficiente para contener la transmisión de la variante Delta en la comunidad como: evitar aglomeraciones, conservar la distancia entre personas y con otras familias, los espacios abiertos y ventilados, el lavado de manos estricto, mantener el protocolo de tosido y estornudo y el uso correcto de las mascarillas. Esto asegura, “hasta que una mayor parte de la población esté completamente vacunada, a fin de evitar un resurgimiento de casos con un posible aumento de las hospitalizaciones y la mortalidad”.
A las 9:30 de la mañana se realizará un conversatorio Llegó la variante Delta, ¿qué debemos hacer? con la participación de la doctora Guiselle Guzmán Hidalgo, epidemióloga y el doctor Cristian Pérez Corrales, microbiólogo, el cual se transmitirá en la página facebook de la Caja Costarricense de Seguro Social.