Por Massimo Gambari, Presidente de la Cámara de Turismo de Playa Sámara.
Hace unos pocos días el Instituto Costarricense de Turismo (ICT) presentó los datos de un estudio que tenía entre los objetivos principales brindar una radiografía del mercado local de visitantes a los distintos puntos de atracción, las características de ese segmento y la definición de los hábitos de consumo de los costarricenses en este campo, entre otros detalles sumamente valiosos.
Para los efectos de la Cámara de Turismo de Playa Sámara es motivo de esperanza que entre las preferencias del público nacional para escoger los sitios donde vacacionar esté -entre otros lugares- la provincia de Guanacaste.
El estudio del ICT reveló que las playas representan el 47% del gusto de los ticos, mientras que la opción de montaña fue seleccionada por el 29%. Las actividades que más llevan a cabo los costarricenses durante las vacaciones, según el estudio, son sol y playa (79%), seguido de senderismo (23%), observación de flora y fauna (18%) y aguas termales (10%).
La experiencia histórica en el caso de nuestra comunidad es un claro reflejo de esas cifras porque en este distrito de Nicoya el grupo de clientes provenientes del Valle Central y otro lugares de Costa Rica siempre ha representando un valor de mercado importante.
Además, el favor de los costarricenses por lugares como Playa Sámara tiene un impacto directo en la promoción de las economías locales mediante el consumo de productos en miles de sodas, cafeterías, supermercados, cabinas, tiendas de ropa de verano y otro largo etcétera.
En muchas ocasiones cuando se habla de turismo se piensa en visitantes extranjeros, pero sin duda alguna el mercado nacional que contribuye a generar miles de empleos en toda la geografía nacional. Ese impacto se puede apreciar con fácilidad durante las épocas de vacaciones o en los fines de semana largos cuando las playas guanacastecas se llenan de costarricenses.
Gracias a ese empuje miles de Pequeñas y Medianas Empresas (PYMES) ligadas a la industria turística costarricense salen avantes ganando espacio en el gusto de los compatriotas que saben apreciar el talento criollo y el emprendedurismo.
En cuanto al gasto, el estudio del ICT reveló que los hogares ticos invierten en promedio un rango que va desde los ¢187 887 hasta los ¢212 424 y el monto por persona, por noche, ronda entre ¢27 070 y ¢29 985. Estos gastos se distribuyen principalmente en tres categorías, un 42% en alojamiento, un 30% en alimentación y 21% en transporte, entre otros.
Esas cifras de la investigación de campo del ICT -que consultó a 2 800 familias en todo el país- ofrecen una perspectiva clara de que el turismo local es un nicho importante para apoyar a las economías cantonales pero, sobre todo; esbozan un futuro promisorio para los empresarios nacionales.