Con el propósito de continuar respaldando los esfuerzos que buscan la detección temprana de intentos suicidas en la población adolescente, la Caja Costarricense de Seguro Social iniciará, a partir de mañana, una campaña que pretende alertar a los padres de familia, encargados y educadores para que conozcan y dete cten las señales de alerta que sugieran alguna afectación en la salud mental de sus hijos.
De acuerdo con el doctor Marco Díaz, coordinador del Programa de Atención de Adolescentes de la CCSS, el tema del suicidio constituye una problemática de salud pública que ha sido siempre una prioridad para la institución y debe contemplar un abordaje multisectorial que permita una mayor captación y atención oportuna de los casos, principalmente en los adolescentes.
Aseguró que en nuestro país, en promedio, se consuman unos 318 casos de suicidio por año y cada vez son más frecuentes los casos de intento suicida, predominantemente en mujeres. Aunado a lo anterior, se evidencia un aumento de estudiantes que muestran lesiones autoinflingidas en diversas partes de su cuerpo.
Por otra parte, durante el primer semestre de este año, el servicio de Emergencias del Hospital Nacional Psiquiátrico atendió un total de 161 menores de edad con diagnóstico de intento suicida: 125 mujeres y 36 hombres, con edades comprendidas entre los 10 y los 16 años.
Durante ese mismo periodo, 27 menores fueron atendidos por la misma causa en el servicio de Consulta Externa de ese hospital. De ellos, 24 son mujeres y tres hombres.
La mayoría de las consultas por esta razón en este establecimiento de salud, la constituyen mujeres, a partir de los 13 años de edad.
De acuerdo con la licenciada Gabriela López Regidor, jefa del Área de Mercadeo Social de la CCSS, ante esta evidencia la campaña de comunicación, bajo el lema "Hablar es necesario: Prevengamos el suicidio", se contempla un mensaje de sensibilización dirigido a padres, cuidadores y educadores de este sector de la población para que identifiquen las señales de alerta y los factores protectores que contribuyan a la prevención de conductas de riesgo suicida. La campaña estará al aire todo el mes de noviembre en televisón, radio, cines y redes sociales.
Aseguró que se busca además motivar a jóvenes en riesgo, entre los 13 y los 18 años de edad, para que se acerquen a un adulto de confianza y comuniquen sus sentimientos e inquietudes, así como promocionar prácticas saludables de salud mental en este sector de la población.
De la misma manera, estos esfuerzos en comunicación buscan motivar el desarrollo de estrategias preventivas y factores de protección para la detección temprana de este riesgo y así contribuir de manera oportuna en un cambio de decisión.
Según el doctor Díaz, la responsabilidad de aumentar la capacidad de control del suicidio como un fenómeno social, mantiene a la institución en el desarrollo de múltiples acciones preventivas y de tratamiento, a través de sus políticas institucionales de Salud Mental y de Adolescentes, las cuales, priorizan en estas poblaciones la contención del desarrollo emocional, salud física, educación, sensibilización, estilos de vida saludable, entre otros, que buscan una mayor conciencia sobre este fenómeno, la necesidad de un abordaje oportuno, pero ante todo, una disminución en la incidencia de casos.
De la misma manera, explicó, estos esfuerzos institucionales se concentran, actualmente, en la actualización de un protocolo para la atención y el seguimiento de menores de edad con riesgo de suicidio y así, ajustar los nuevos conocimientos a las necesidades que se presenten de una forma más apropiada.
Dicha actualización contemplará de forma prioritaria la promoción y ejecución de acciones conjuntas entre diversas instancias involucradas con la atención y el manejo de la población adolescente, con el propósito de lograr una mayor participación social y contención, mediante la capacitación y la ejecución de trabajos grupales relacionados con el fortalecimiento de la salud mental, a través de la cultura, el deporte, la educación, entre otros.
Adicionalmente, la institución ha procurado ir extendiendo de forma paulatina el fortalecimiento de la salud mental en el primer nivel de atención, a través de los Equipos Interdisciplinarios en Salud Mental (Eisam), una modalidad para la atención diferenciada de personas víctimas de trastornos mentales, de comportamiento, violencia y adicciones, que mantienen una estrecha relación con el riesgo suicida. Precisamente a partir del año entrante la CCSS contará con tres Eisam adicionalmente en Cañas, Alajuela y Liberia, de manera que contará con un total de 13 Eisam.
Para el doctor Díaz, el fenómeno del suicidio en la juventud puede prevenirse desarrollando una comunicación afectiva tanto en la familia como con las amistades y en los centros educativos.
Especificó que cuando el caso lo demande, la familia debe buscar ayuda profesional, en virtud de que el suicidio constituye un fenómeno macrosocial que abarca problemas económicos, sociales y políticos, los cuales hacen que el adolescente desarrolle una desesperanza en relación con la vida.