Santos Prieto, es un personaje muy conocido en el distrito de Colorado de Abangares por su experiencia y emprendimiento en el actividad económica y social de la producción de sal de manera artesanal, sus oficios los inicio desde que era un adolescente de 13 años; en ese entonces sus funciones eran: rastrear las pilas donde se encontraba la materia prima, cocinar la sal, para obtener al final una sal de calidad; lista para vender.
Las salinas son una especie de minas donde se encuentra la sal, que se obtiene tras el proceso de evaporación del agua salada, estas salinas fue una herencia de sus padres y quienes también lo heredaron éstos de los abuelos de Santos, una herencia familiar que ha dado sustento económico a tres generaciones de la familia Prieto.
Su vocación le ha permitido ascender puestos en esta actividad económica, e incluso emprender en el sector cooperativo. En 1974 nace la Cooperativa Nacional de Productores de Sal, (CONAPROSAL R.L), una cooperativa orgullosamente abangareña con 45 años de existencia que ha impulsado desarrollo económico y social a sus habitantes, generando empleo y productividad al cantón.
Actualmente Santos forma parte del Comité de Educación de la Cooperativa y es miembro fundador de la cooperativa.
Prieto es un mañanero, como buen guanacasteco, siempre listo y con buena disposición para emprender su jornada laboral quien dirige y acompaña a sus peones en las salinas, para que ellos cocinen la sal en las pailas, las cuales son bien calientes, y hay que tener mucho cuidado.
Este abangareño de corazón, explicó a Periódico Mensaje que el proceso de la sal inicia desde la extracción del producto desde del mar.
Prieto, con su espíritu luchador que lo caracteriza, tuvo la visión de mantener y explotar de forma sostenida la elaboración del oro blanco, creando en conjunto con otros hombres talentosos una cooperativa exitosa, que hoy llega a dar sazón a las comidas de los costarricenses.
Santos expresó que la famosa marca “Sal Sol”, es debido a que la sal es secada al sol y de allí proviene el nombre de la marca, la cual, es conocida por los costarricenses.
Prieto se caracteriza en ser una persona accesible, alegre y sobre todo amante de la vida, quien destaca que, de cada persona, siempre hay algo bueno que se puede aprender.
Actualmente tiene 74 años, y sigue activo en sus oficios, demás es un enamorado de su hermosa mujer, quien siempre lo espera en su casa dándole sazón a su vida.
Colabora en la nota Erika Fernández, Periodista de Periódico Mensaje