- Sobresale por la tonalidad clara de su grano rojo y por presentar resistencia a diversas enfermedades que afectan el cultivo de frijol, entre estas el “mosaico dorado amarillo del frijol”.
Una nueva variedad de grano rojo, denominada QUIRIBRÍ, desarrollada por la Universidad de Costa Rica (UCR), el Instituto Nacional de Innovación y Transferencia en Tecnología Agropecuaria (INTA) y el Centro Internacional de Agricultura Tropical (CIAT), fue liberada oficialmente en Santa Lucía de Chánguena en Buenos Aires de Puntarenas, este 12 de diciembre del 2024.
El proceso de selección y validación fue llevado a cabo en conjunto con los productores de frijol. Para esto se contó con el apoyo financiero del Fondo de Desarrollo Noruego y la Iniciativa DARWIN, a través de ASOCUCH de Guatemala, la Cooperación para la Alimentación y la Agricultura entre Corea y Latinoamérica (KoLFACI), la Alianza Centroamericana y Caribeña para el Mejoramiento Genético de Cultivos (CACCIA) y el proyecto de Producción de Semilla Genética y Fundación (ED-158).
La variedad QUIRIBRÍ sobresale por la tonalidad clara de su grano rojo y por presentar resistencia a diversas enfermedades que afectan el cultivo de frijol, entre estas el “mosaico dorado amarillo del frijol”. Además, muestra rendimientos similares a los de la variedad Cabécar (la más cultivada en Costa Rica) y superiores a la variedad Chánguena, según el criterio de los investigadores que participaron en su desarrollo.
El proceso de investigación de la variedad QUIRIBRÍ inició en el 2016. Fue evaluada en las distintas zonas de producción, así como en condiciones de sequía y alta temperatura. Sin embargo, mostró una mejor adaptación en la zona de Chánguena de Buenos Aires, donde los productores decidieron adoptarla para producción comercial.
Una vez liberada una variedad, la producción de semilla inicia con la categoría Fundación generada por la Estación Experimental Agrícola Fabio Baudrit Moreno de la Universidad de Costa Rica. A partir de esta, el Consejo Nacional de Producción reproduce la semilla certificada para ponerla a disposición de productores interesados en cultivarla. Este proceso es supervisado por la Oficina Nacional de Semillas, que certifica la calidad de las semillas. Adicionalmente, las organizaciones de productores a través de un proceso de producción local obtienen semilla para abastecer parte de sus necesidades.
Durante la actividad, los productores de la zona pudieron conocer en detalle las principales características de la variedad Quiribrí y la degustaron en un delicioso almuerzo como cierre de la actividad.