Presentan resultados del estudio de satisfacción de los usuarios.
El más reciente estudio de opinión realizado por la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (ARESEP) determinó que únicamente un 14% de los encuestados en la Región Chorotega conoce cuál es el procedimiento técnico que lleva a cabo la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (ARESEP) para determinar el precio de los pasajes en el transporte público en la modalidad de autobús o taxi.
De acuerdo con la décima encuesta denominada “Grado de satisfacción de los usuarios de los servicios públicos regulados por la ARESEP”, en el caso de Guanacaste un 64% sí está enterado de cuál es la suma que deben cancelar cuando se movilizan mediante cualquiera de los citados medios de transporte.
La consulta nacional se realizó mediante 2 406 entrevistas a mayores de edad (muestra aleatoria) con un 2% de margen de error y un 95% de nivel de confianza con estratificaciones por región y zona mediante visitas a viviendas realizadas por parte de la empresa IPSOS S.A.
El trabajo de campo de la encuesta se llevó a cabo entre octubre y noviembre del año pasado. El 63% de las personas encuestadas fueron mujeres y 37% hombres. El 31% de las personas tenían entre 18 y 35 años, el 34% entre 36 y 55 años y el 35% con más de 56 años.
Entre los motivos más usuales para abordar un autobús están: hacer mandados (60%), citas médicas (29%) o ir al trabajo (23%). Igualmente el 51% de las personas manifiestan haber percibido retrasos en la llegada del autobús a la parada, de estos 48% cataloga la espera de “mucho tiempo”, 25% como “ni poco ni mucho” y 38% como de “poco tiempo”; además, 30% de estas personas califican los retrasos como “muy frecuentes” y 30% como “frecuente”.
Poca difusión
Reiner Canales, Presidente de la Asociación para la Defensa de los Usuarios de los Servicios Públicos, indicó que el desconocimiento en las metodologías de cálculo de las tarifas “se presta para grandes abusos”.
“Ese hecho es, en parte, un gran responsabilidad de la misma ARESEP que nunca se ha preocupado por realizar buenas campañas de divulgación en prensa escrita, radio, televisión o redes sociales incluso. El hecho de que buena parte de la gente no sepa cuánto debe pagar, ni como se calcula ese montó, ha generado enormes injusticas en muchas partes del país donde hemos visto aumentos de un 200 e incluso un 300 por ciento”, lamentó Canales.
Según Canales el modelo de gestión del transporte público deja de lado “las demandas de los clientes para favorecer a las grandes compañías autobuseras que se aprovechan del desconocimiento de la gente para solicitar incrementos muchas veces exagerados”.
“Hay que realizar una labor educativa muy fuerte en este campo para cambiar esta situación y que la voz de la gente sea más escuchada, porque solamente se oye a las Cámaras de Autobuseros que velan por sus intereses, pero la gente queda fuera”, expresó el Presidente de la Asociación.
En relación con la calidad de los autobuses del total de consultados un 31% indicó que se encuentran en mal estado, deteriorados o tienen faltas de mantenimiento, mientras que un 15% de los pasajeros calificó de “viejas” a las unidades. Otros inconvenientes fueron: asientos rotos (12%), suciedad (11%), se quedan varadas (8%), maltrato de los choferes (5%) y ruido excesivo (%4).