Por Sobina Yu, Graduada del Programa del Diploma (PD) del Bachillerato Internacional, quien comparte algunos consejos con los alumnos que están a punto de emprender la experiencia de aprendizaje del IB.
La experiencia es uno de los mejores maestros del mundo. Por eso, cuando afrontamos un cambio importante en nuestras vidas, como empezar a estudiar el Programa del Diploma (PD), siempre recurrimos a personas que ya han pasado por una experiencia similar para que nos guíen. Al igual que hicieron mis mentores durante toda mi etapa en el IB, espero poder ayudar a las futuras generaciones de alumnos durante su experiencia de aprendizaje en el Programa del Diploma (PD). Si bien entiendo que no todo el mundo está en la misma situación socioeconómica y ambiental que yo, este artículo contiene unos cuantos consejos que, a mi juicio, se pueden aplicar independientemente de las condiciones vitales de cada cual.
1. Aunque tener grandes aspiraciones es siempre admirable, es importante elegir una opción “segura” para los trabajos de evaluación interna y la Monografía
La elección de un buen tema para la evaluación interna y la Monografía es una tarea exigente, no sólo en cuestión de esfuerzo, sino también de tiempo. Hay muchos factores que se deben tener en cuenta, tales como la disponibilidad de materiales, la originalidad de la idea, la viabilidad de las metodologías, etc. La validación de todo eso puede requerir hasta una semana de trabajo. Si multiplicamos ese tiempo por el número de asignaturas y demás tareas que debemos realizar durante toda nuestra etapa en el IB, cualquier alumno puede sentirse fácilmente intimidado. Por eso, recomiendo a los futuros alumnos del IB que consideren elegir un tema “seguro” antes de inclinarse por una opción innovadora que al final no resulte factible. Al fin y al cabo, las preguntas de investigación son ilimitadas y siempre podrán encontrar un tema “seguro” que les interese.
Si el tema elegido está orientado a la investigación, también es importante que la metodología propuesta sea correcta para poder reproducir los resultados. Del mismo modo, la metodología determinará si una pregunta de investigación es o no factible. Por eso, y para ahorrar tiempo, esfuerzo y dinero, recomiendo validar la metodología con los supervisores antes de pasar al experimento real. En este paso también se debe evaluar el uso de los aparatos y productos químicos adecuados para el estudio. Lo ideal es que se preparen planes de contingencia por si la metodología no funciona como estaba previsto.
2. Abordar Creatividad, Actividad y Servicio (CAS) como una experiencia de aprendizaje
Me perdí muchísimas experiencias de CAS porque siempre tenía que hacer alguna tarea, estudiar para algún examen, etc. Entiendo que la vida de un alumno del IB no puede centrarse exclusivamente en CAS, pero se trata de una oportunidad única en la vida que no volverá a repetirse, a menos que uno decida poner en marcha proyectos de ese tipo por iniciativa propia en el futuro. Sin embargo, el vínculo que se crea con los compañeros de clase (risas de alivio, auténtico trabajo en equipo y pequeñas victorias) no se puede recuperar, ni siquiera participando en experiencias similares a posteriori. Esta es una de las cosas de las que más me arrepiento como alumna y exalumna del IB. Por eso, mi humilde consejo es que todos los alumnos del IB participen activamente en las experiencias de CAS que organicen sus compañeros. Créanme lo que les digo. Siempre habrá otro día para recuperar sesiones de estudio, experimentos, etc.; sin embargo, las experiencias de CAS no vuelven.
3. Organizarse con los apuntes y las estrategias de aprendizaje
“Es importante conocer las estrategias de aprendizaje propias. ¿Nos va bien con los libros? ¿O aprendemos mejor con tutoriales de YouTube?”
El período de exámenes externos del IB dura aproximadamente un mes. Es muy poco tiempo para estudiar tantas cosas. Infortunadamente, por mucho que queramos repasar todos los recursos disponibles en Internet y en nuestros libros, no es una tarea fácil. Por eso, es importante elegir bien los recursos que se utilizarán para repasar los contenidos durante el período de exámenes externos. Si intentamos repasar todos los recursos disponibles y todos los libros del IB, lo más probable es que acabemos por perder el norte. Por otro lado, es importante conocer las estrategias de aprendizaje propias. ¿Nos va bien con los libros? ¿O aprendemos mejor con tutoriales de YouTube?
Ya que este tema está sobre la mesa, me gustaría compartir algunas de mis estrategias de aprendizaje. Mis recursos son una combinación de videos de YouTube, libros, guías de estudio y bancos de preguntas. En la mayoría de los casos, veo algunos tutoriales de YouTube antes de leer el libro de texto. La guía de estudio de los libros de texto también me resulta muy útil como guion para ver lo que he retenido. También recomiendo estudiar los elementos básicos de una lengua antes de estudiar para los exámenes de literatura; un ejemplo de esto sería aprender todo el vocabulario posible para mejorar la expresión escrita. Duolingo es una magnífica plataforma para aprender vocabulario y gramática, así que recomiendo utilizarla durante los cursos de Lengua ab initio.
Es importante usar con precaución los recursos de la plataforma para evitar el plagio. Como ocurre con los bancos de preguntas, solo se deben usar para complementar las ideas propias, que son las que siempre deben plasmarse en el papel.
4. Equilibrar las prioridades
Cada persona tiene sus propias prioridades cuando se incorpora al IB. Sean cuales sean estas prioridades (por ejemplo, acceder a una de las mejores universidades del mundo, obtener una calificación de 45 o tener la oportunidad de aprender algo nuevo), es importante no perderlas de vista, porque serán nuestra fuente de motivación cuando no nos sintamos capaces de realizar un trabajo concreto o cuando nos resulte difícil mantener el control y el equilibrio de las tareas. Además, dado que el tiempo es un recurso escaso en el PD, es inevitable que tengamos que sacrificar algunas cosas. Las prioridades serán una guía para que no nos sintamos perdidos en la vida.
5. No pasa nada por suspender
Antes de obtener el diploma del IB, suspendí tres de mis seis asignaturas. Durante el primer ciclo de secundaria había sido una alumna de matrícula de honor, así que me costó asimilar esos reveses. No obstante, gracias al apoyo incondicional de mis padres, me recuperé casi al instante y aproveché esos contratiempos como motivación para esforzarme todavía más, porque sabía que tenía mucho trabajo por delante para ponerme al día. Sinceramente, pienso que es muy importante utilizar los fracasos para mejorar como persona en general.
Espero que este mensaje sirva para que quien haya suspendido alguna vez no tire la toalla. Es mucho más constructivo hacer algo para mejorar; hay que aprovechar la oportunidad y utilizar esa experiencia de aprendizaje para esforzarse aún más. Al fin y al cabo, el aprendizaje no termina cuando se obtienen malas calificaciones.