El Día Mundial de las Aves Migratorias se celebra dos veces al año, el segundo sábado del mes de mayo y de octubre, para concienciar a la población sobre la conservación de las aves migratorias y sus hábitats, sensibilizar sobre las amenazas a las que se enfrentan las aves migratorias, su importancia ecológica y la necesidad de cooperar para conservarlas.
Desde el año 2018 se aunaron las dos grandes campañas que entonces existían para proteger a las aves migratorias: el Día Internacional de las Aves Migratorias y el Día Mundial de las Aves Migratorias, el primero de ellos dirigido por Environment for the Americas (EFTA), y el segundo por el Acuerdo sobre la conservación de las aves acuáticas migratorias de África y Eurasia (AEWA) y la Convención sobre la Conservación de las Especies Migratorias de Animales Silvestres (CMS).
A partir de 2018, la nueva campaña conjunta adopta el nombre único de Día Mundial de las Aves Migratorias.
El lema de la campaña para 2020 del Día Mundial de las Aves Migratorias es "Las aves conectan nuestro mundo." La campaña, dirigida por las Naciones Unidas tiene especial relevancia en un momento en el que la mayoría de la población mundial tiene restringido su movimiento a causa de la pandemia de coronavirus.
La campaña incide en la idea de que es importante conservar y restaurar la conectividad e integridad ecológica de los ecosistemas, para que el equilibrio se mantenga y los ciclos naturales que necesitan estas aves sigan produciéndose.
La Reserva Biológica Lomas Barbudal, en San Ramón de Bagaces, destacó en su Facebook la conocida ave local “pájaro cebra”, “pájaro cuijen” o “batará barreteado” (Thamnophilus doliatus), la cual está presente en este bosque tropical seco y es una de las muchas especies que engalanan este pequeño paraje.
Fuente: diainternacionalde.com y Facebook Reserva Biológica Lomas Barbudal