Vivir experiencias auténticas que resguarden los valores de un destino, es uno de los pilares actuales del viajero. La infraestructura, la gastronomía, su belleza escénica, su gente y cultura, son parte de los atractivos que conceptualizan el lugar.
Bajo esta consiga, el Restaurante del Hotel y Club Condovac La Costa, fortalece su esencia de ser un restaurante “auténticamente tico”, dirigido a un mercado familiar, con una belleza escénica espectacular, donde los clientes y visitantes tienen la oportunidad de contemplar vistas doradas que se emergen y se ocultan en el mar, rodeado además de exuberantes montañas. Este paisaje fue la inspiración de su nombre: Vista Dorada.
La experiencia culinaria, inicia con el encanto de su paisaje; luego la exposición de los murales te transporta al pasado, para recordar las vivencias del guanacasteco de antaño. Algunas de las obras son: el sabanero con sus bueyes, la mujer campesina en la cocina; palmeando tortillas en un horno de leña, la casa de adobe; con tejas, etc...
Parte de las obras expuestas en el restaurante son creadas por el pintor guanacasteco Luis Gallo, residente del pueblo Sardinal. La elección de la temática de las obras, y otros adornos como la carreta típica y el pilón, son parte de las innovaciones que expone el restaurante Vista Dorada.
La presentación del menú es otros de los cambios importantes que ha tenido el restaurante. La comida es montada y servida en una “chuleta o galleta de madera” como popularmente se dice; esta se envuelve en una hoja de plátanos o almendro, lo que le da un concepto típico ¡qué encanta a sus clientes!. El arroz con pollo o de camarones es servido en un coco; lo que también cautiva a los visitantes, otra decoración de los alimentos es el ceviche que es colocado dentro de una piña. Los frascos para dispensar las salsas y servilletas son de material de bambú.
Sostenibilidad Ambiental
Ser amigos del ambiente, es otro de los baluartes del hotel, a la vanguardia en este tema, el restaurante a eliminado el uso del plástico en sus vasos y pajillas, sustituyéndolas por cartón, este cambio ha tenido un impacto importante en el ahorro del plástico, lo que le ha permitido aportar, su huella verde. Otra acción en este campo es que esta práctica ha sido transferida a sus colaboradores y clientes, por medio de charlas y concientización con el uso del plástico.
La huerta, es otro compromiso que, se suma a las acciones de convertirse en un restaurante auto sostenible, lo que garantiza que los productos que se siembran son orgánicos y más frescos, lo que brinda calidad a sus productos y mayor bienestar y a sus consumidores.
La cafetería y la taquería se suman a los cambios e innovación del hotel. Las rosquillas, tanelas son parte del menú de la repostería; lo que complementa y rescata una experiencia auténtica costarricense con esencia guanacasteca.
Otras de las acciones sostenibles, es la búsqueda proveedores de productos alimenticios que realicen procesos más sostenibles y saludables en sus procesos de operación.
Responsabilidad Social
Construir puentes de emprendimientos que generen desarrollo económico y social con sus localidades vecinas, es parte de las responsabilidades del hotel. Una acción concreta en ese campo es la contratación del recurso humano, el cual, en su mayoría es residente de la zona. Los artistas y talento de la zona también son reconocidos y valorados en el hotel, al ser contratados para exponer sus obras.
Todos estos esfuerzos van ligados al compromiso del hotel en materia de responsabilidad social y ambiental y de su estrategia de fortalecer la competitividad de sus productos y su servicio, abonado en brindar también estilos de vida saludables y sostenibles en el tiempo; resguardando siempre, la autenticidad del costarricense.
Déjate cautivar por el majestuoso paisaje que te brinda el Restaurante Vista Dorada, y viví una auténtica experiencia culinaria con “sello tico”.