Con la finalidad de que la población asegurada pueda disponer de sus medicamentos con mayor agilidad, la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) extendió la receta electrónica a 53 establecimientos de salud distribuidos en toda la geografía naciona l.

El doctor Roberto Cervantes Barrantes, gerente médico de la CCSS, explicó que esta posibilidad representa un gran salto cualitativo en la prestación de servicio de salud que la institución ofrece los 365 días del año.

La autoridad médica de la CCSS dijo que esta nueva funcionalidad del Expediente Digital Único en Salud ( Edus) permite tener el perfil farmacoterapéutico de cada paciente, trazabilidad de la información, control de los despachos, dosis y los tipos de medicamentos que los profesionales en ciencias médicas han prescrito en los diferentes establecimientos de salud: hospitales, áreas de salud y sede de Equipos Básicos de Atención Integral en Salud (Ebáis).

Por su parte, el doctor Esteban Vega de la O, Coordinador Nacional de Servicios Farmacéuticos de la CCSS, destacó que los beneficios de la receta electrónica son múltiples,  puesto que al paciente se le agiliza la entrega de fármacos y se le simplifica la interacción con la institución.

Explicó que el paciente solamente debe hacer la fila para retirar los medicamentos, puesto que ya no tiene que presentarse en la ventanilla a entregar la receta, tampoco debe ir a solicitar correcciones o confirmación de la prescripción ante el médico, en virtud de que este proceso se realiza entre las farmacias y el prescriptor.

En el caso de los pacientes crónicos que son atendidos por un especialista de un hospital nacional, regional o especializado, las recetas viajan electrónicamente hacia el lugar de adscripción donde está el paciente, ya sea la sede del Ebáis o el área de salud.  De esta forma el medicamento viaja hacia donde se encuentra el  paciente y no a la inversa.

De acuerdo con Vega de la O, otro de los beneficios es que a nivel de la consulta médica hay una mayor utilización del tiempo porque el médico a través de un proceso ágil de prescripción podrá dedicarlo a la atención directa, pues no tendrá que escribir recetas.

La implementación de la receta electrónica ha permitido despachar hasta el momento 7.5 millones de medicamentos en 26 hospitales, 27 áreas de salud y 218 sedes de Ebáis.  La meta es que esta receta electrónica se encuentra implementada en todos los establecimientos de salud en el 2019.

Esta receta electrónica requirió como fases previas la interconectividad de los diferentes servicios de farmacia, lo que conlleva a que se tenga un único perfil farmacoterapéutico donde se visualicen los diferentes medicamentos que le han sido prescritos en los diferentes establecimientos de salud.

Esto situación representa una economía institucional, toda vez que evita la duplicidad de tratamientos, permite conocer las dosis con las que se ha venido prescribiendo, desde cuándo se vienen utilizando lo que produce un uso correcto y racional de los medicamentos.  También la receta electrónica permite controlar y determinar aquellos pacientes que son policonsultantes

Receta electrónica es la integración de dos sistema de información que integra el Expediente Digital Único en Salud como son el sistema integrado de farmacia ( SIFA) y el Sistema Integrado de Expediente en Salud ( SIES).   La receta electrónica arrancó como plan piloto en el 2016 en las áreas de salud de Desamparados 3, área de Salud de Chacarita, en el Hospital Monseñor Sanabria de Puntarenas y el área de salud de Limón.

La CCSS despachó en el 2017, 84.7 millones de medicamentos.

Beneficios para el paciente:

• Reducción del tiempo de espera.
• Direccionamiento de las recetas subsecuentes al centro de adscripción del paciente.
• Trazabilidad de la información de los medicamentos prescritos.
• Eliminación de la fase de entrega de la receta por parte del paciente.
• Disponibilidad de los medicamentos de especialistas en el lugar de adscripción lo que evita desplazamiento innecesario y eventuales atrasos en la entrega del fármaco.
• Se eleva la seguridad al eliminarse la transcripción de las recetas física al sistema de información.
• Se reducen los contratiempos por legibilidad de letras.