En la nota colabora Silleny Sanabria Soto, Periodista de Periódico Mensaje

En el marco del Día del Trabajador a celebrarse este 1 de mayo, el movimiento obrero del país enfrenta uno de los desafíos más fuertes vividos en los últimos años; tratar de combatir la pandemia mundial y a la vez proteger la seguridad de los trabajadores, de forma tal que se logre reanudar la actividad y que logre funcionar como en tiempos antes del COVID-19.

 Según la Organización Internacional del Trabajo (OTI), las medidas de paralización total o parcial ya afectan a casi 2700 millones de trabajadores, es decir; alrededor del 81% de la fuerza de trabajo mundial. Según datos del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS), en el país al 23 de marzo anterior 9728 personas se quedaron sin empleo.

Costa Rica forma parte de los 187 Estados Miembros de la OTI, que ha implementado medidas sin precedentes para atenuar el impacto de la crisis sobre las empresas, los empleos y los miembros más vulnerables de la sociedad. Entre las medidas tomadas mediante Decreto Ejecutivo, el Gobierno ha planteado posibles soluciones legales que empresas privadas y actores del sector público pueden adoptar, entre ellas: la suspensión de contratos de trabajo la cual no implica el cese de la relación laboral, la toma de vacaciones mediante un acuerdo entre el trabajador y patrono, la modalidad de teletrabajo, en virtud de la cual un trabajador puede desarrollar, en parte o totalmente, su jornada laboral, el Bono Proteger para trabajadores independientes, informales o bien quienes hayan sido afectados, entre otros.

Sector turismo en “Temporada Cero”

De acuerdo con datos de la Cuenta Satélite del Banco Central (BCCR), en 2018 había 219.165 personas que se encontraban ocupadas en actividades asociadas al turismo, sector que en este momento está en “Temporada Cero” y la cual se prolongaría hasta por tres meses afectando a todos sus trabajadores.

La Subcomisión de Estadística y Censos de la Comisión de Enlace Monteverde 2020 indicó que de 1343 personas trabajadoras de turismo, 448 sufrieron suspensión de contrato de trabajo, 405 fueron despedidas, 214 son trabajadores independientes con ingresos afectados, a 179 les redujeron la jornada laboral, 79 estaban desempleados antes del COVID-19, 14 son asalariados sin ingresos afectados por la pandemia, pero sí reducidos o afectados en otras fuentes de ingresos, y seis están pensionados. Una segunda encuesta realizada por la Cámara de Turismo de Monteverde a 42 empresas arrojó el dato de 798 empleados afectados por despido, suspensión de la jornada o reducción. Sin embargo, este número de empresas solo constituye una muestra parcial del total de empresas afectadas. Dicha encuesta se entregó a la Municipalidad de Abangares y Tilarán, pues hay mucha gente que trabaja en Monteverde y viajan a diario desde la zona alta de Abangares, Tilarán y Quebrada Grande.

Impactos del covid-19 en el comercio exterior, agro y los servicios en Costa Rica

Además del turismo, el entretenimiento masivo, las cadenas para proveer materias primas, la educación, el agro y la industria forman parte de los sectores que, por sus características, tienen más afectación ante la emergencia por el covid-19.

Según una investigación del Observatorio de Comercio Exterior (OCEX) y la Universidad Estatal a Distancia (UNED), con respecto al sector exportador, las empresas costarricenses de comercio exterior reportan el lento avance de embarques y desembarques en los puertos de Asia, retrasos en el retorno de contenedores y el “enfriamiento” de los pedidos de compras en los países hacia los que Costa Rica exporta. Se presentan atrasos y ventas menores por mantener la fruta y otros productos en los muelles chinos, por lo cual se cobra además montos extra de hasta USD$1500 por mantener cada contenedor.

El agro relacionado como uno de los sectores de exportación que se ha visto más golpeado es de la carne de bovino. Los ganaderos habían logrado un importante avance en la colocación del producto en China, pero desde enero se está atrasando el desembarque de los contenedores, ante la baja en la actividad en los puertos chinos.

Referente al sector de servicios, se destaca su afectación principalmente en el turismo interno, en donde los hoteles del país reportan más de 10.000 noches canceladas y esperan caídas de entre 80% y 90% en las reservaciones futuras.

Por causa de cierres hoteleros y de restaurantes, el sector pesquero del país también ha sido afectado, en donde la pesca turística, de palangre y artesanal, están de momento paralizadas. Aunada está la disminución de la demanda para el comercio de exportación y los precios por los productos también han bajado de forma significativa, según el Instituto Costarricense de Pesca y Acuicultura.