El Ministerio de Educación Pública (MEP), eliminó las conocidas pruebas de Bachillerato, para dar paso a una nueva metodología de evaluación integral llamada Fortalecimiento de Aprendizajes para la Renovación de Aprendizajes (FARO).
Este novedoso modelo será aplicado a los estudiantes que cursen los niveles de primaria y secundaria, con el fin de comprobar sus conocimientos y de obtener información sobre el proceso académico de instituciones públicas y privadas.
Las modificaciones comenzarán a reflejarse a partir de este año de la siguiente manera:
En primaria: Las pruebas serán parte de un plan piloto y se aplicarán para los estudiantes de quinto grado y no sexto como es costumbre. El resultado final obtenido no será evaluado, sino hasta el 2020 cuando comience a regir la evaluación oficial de las mismas.
En secundaria: Este año los estudiantes de undécimo año deberán cumplir por última vez las pruebas de Bachillerato normalmente y bajo el esquema de evaluación aplicada en años anteriores (40% de examen + 60% de nota de presentación). Mientras que quienes cursan el décimo año, deberán realizar las Pruebas Nacionales FARO.
Secundaria técnica: En el 2019 los estudiantes que cursan duodécimo año en Colegios Técnicos Profesionales del país, también tendrán que hacer el Bachillerato bajo el mismo esquema (40% examen + 60 nota de presentación); y quienes están en undécimo año harán FARO.
Generación 2018: Los estudiantes que aún tienen pendientes la aprobación de pruebas de Bachillerato podrán presentarse a las convocatorias según el Calendario Escolar del MEP.
Rezagados hasta el 2017: Quienes no lograron aprobar el Bachillerato en ese año, deberán realizar sus pruebas bajo el sistema de Educación Abierta.
Con este sistema, las materias que se evaluarán serán: español, matemáticas y ciencias solamente. En el caso de Estudios Sociales, aún está en proceso de modificación.
Además los resultados se evalúan de forma individual, de manera que si un estudiante de quinto grado, realizó las Pruebas Nacionales FARO, y obtuvo un porcentaje mayor a 30% en español y matemáticas, por ejemplo, pero obtuvo apenas un 19% en ciencias, podrá repetir la prueba el próximo año cuando esté cursando sexto grado. De esta forma podrá elevar su nota y obtener un mejor promedio final. Lo mismo se aplica en secundaria.
El programa de estudios para las materias de lengua extranjera, se enfocará únicamente en un examen que permitirá conocer el nivel de dominio del idioma por parte del estudiante quien al final obtendrá una certificación constatando que aprobó el curso.
Según Pablo Mena, Director de Gestión y Evaluación de la Calidad MEP, si el estudiante tiene la posibilidad de adquirir En el caso de un atestado por parte de una institución privada, de idiomas como el mandarían, italiano y alemán por ejemplo, el MEP podría reconocer estos títulos y no tendría que someterse a la prueba final que realiza este ente rector.