- El enfoque identifica factores de riesgo para evitar llegar a etapas avanzadas de la enfermedad y así prevenir las muertes
Una nueva esperanza de vida ya está disponible para la población costarricense desde el Centro de Investigación en Cirugía y Cáncer (Cicica) de la Universidad de Costa Rica (UCR).
Se trata de los análisis para el diagnóstico temprano del cáncer de próstata, el tipo de cáncer con mayor mortalidad en Costa Rica, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
De acuerdo con el Observatorio Global de Cáncer de la OMS, cada año se diagnostican en Costa Rica cerca de 1 700 nuevos casos de cáncer de próstata y, aproximadamente, 400 individuos fallecen anualmente a causa de esta enfermedad. ¿El principal motivo de tantas muertes? El diagnóstico tardío.
Ante esa realidad, el Cicica-UCR, junto con la Asociación Proprevención y Lucha contra el Cáncer de Próstata (Aprecap), están ofreciendo paquetes de detección temprana a bajo costo que contempla la medición del antígeno prostático específico (APE), así como una valoración clínica que incluye el examen físico, la evaluación de los síntomas, los antecedentes familiares y el tacto rectal.
El precio del paquete puede variar según las necesidades particulares, por lo que el costo final se le informa a cada persona de manera específica al momento de solicitar su cita al Cicica-UCR al 2511-3322.
Ambos procedimientos se efectúan en las instalaciones de la UCR y su aplicación permite iniciar cuanto antes el tratamiento contra el cáncer, a fin de evitar que las personas lleguen a etapas avanzadas del padecimiento y, por lo tanto, a la muerte.
“Con la UCR hemos logrado gestionar un precio especial para que los hombres puedan venir a realizarse el examen de sangre y el tacto rectal. Con esta medida buscamos disminuir las barreras económicas que impiden que muchos hombres accedan al diagnóstico temprano y, de esta forma, reducir las altas tasas de mortalidad por la detección tardía”, manifestó Hellen Arroyo Mora, directora ejecutiva de Aprecap.
La prioridad
En estos momentos, el Cicica-UCR está brindando atención a pacientes con riesgo alto e intermedio de cáncer de próstata.
El Dr. Azúa explicó que el grupo de riesgo alto lo integran aquellos con familiares de primer orden —papá o hermanos— que han tenido cáncer de próstata antes de los 55 años, pues dicha carga hereditaria aumenta el riesgo de sufrir este padecimiento.
Otro de los grupos identificados como de alto riesgo son los pacientes de etnia afrodescendiente. Se ha visto que tienen un riesgo aumentado. Por lo tanto, “a nivel poblacional se recomienda que inicien el control a partir de los 40 años con tacto rectal y antígeno prostático”, agregó el Dr. Azúa.
Por otro lado, los de riesgo intermedio están conformados por personas de 50 años en adelante quienes, solo por estar en este rango de edad, requieren ser valorados.
Por último, están los hombres en riesgo bajo —menores de 40 años—, a los que se les recomienda tener estilos de vida saludables, hacer ejercicio y poseer una dieta equilibrada para disminuir el riesgo de aparición de la enfermedad.
“El cáncer de próstata es silencioso y crece lentamente. En etapas iniciales el hombre no presenta ninguna molestia y puede estar hasta por cinco, siete o diez años sin molestias. Ya cuando ese tumor creció lo suficiente para dar molestias, quiere decir que es muy tarde y es poco lo que se puede hacer. Esto es lamentable, porque la persona tuvo un buen tiempo para abordarlo y por eso es que insistimos en que siempre consulten de manera rutinaria”, explicó el Dr. Azúa.
Actualmente, la UCR está en capacidad de atender alrededor de cuatro pacientes por semana.
“Queremos que los hombres sepan que el cáncer de próstata puede tratarse exitosamente si se detecta a tiempo. Nuestro objetivo es que más hombres acudan a hacerse los exámenes y así salvar muchas vidas”, subrayó Hellen Arroyo.
Con esta iniciativa, la UCR y Aprecap esperan concientizar a la población sobre la importancia de la detección temprana y, a largo plazo, reducir las elevadas tasas de mortalidad.