Del jueves 28 de marzo al domingo 07 de abril, el Festival Nacional de las Artes (FNA) reunió a más de 1.300 artistas en distintos escenarios de las comunidades que albergaron esta XII edición: Esparza, Orotina y Riojalandia en Barranca de Puntarenas.

A través de la “Ruta de las Artes”, en Villa Nueva, San Juan Chiquito, Limonal y el cantón de San Mateo, también vivieron la fiesta artística y cultural más grande de Costa Rica, cuya propuesta estuvo compuesta por 280 actividades, 180 funciones y más de 80 espectáculos.

Más de 130 mil personas disfrutaron del FNA en sus primeros diez días de actividades, según datos de medición de la empresa Dichter & Neira para el Centro de Producción Artística y Cultural (CPAC) del Ministerio de Cultura y Juventud (MCJ).

“Culminamos una edición más del Festival Nacional de las Artes, con satisfacción y enorme gratitud tanto con las comunidades por su hospitalidad, cariño y entusiasmo; como con los artistas de todo el país que se entregaron en espacios de función y en los talleres, con los colegas de producción del Ministerio junto a los gobiernos locales y los grupos organizados, al público propio y visitante. Despedimos este momento de encuentro y fiesta en el que todas las generaciones convivimos alrededor de nuestras tradiciones y expresiones contemporáneas y desde ya quedamos con el motor encendido encaminados a las ediciones 2020 y al Bicentenario de nuestra fiesta de las artes”, expresó Sylvie Durán, ministra de Cultura y Juventud.

Acto de clausura

El Centro de Producción Artística y Cultural del MCJ, unificó esfuerzos con el Instituto Costarricense de Turismo (ICT), como patrocinador oficial y los gobiernos locales de Esparza, Orotina y San Mateo, para que los ciudadanos de estas y otras comunidades aledañas, pudieran vivir la experiencia de explorar, percibir y comprender desde sus territorios, la cultura y el arte.

El evento de clausura inició a las 4:00 p.m. con un colorido pasacalles a cargo de 320 artistas de la Banda Municipal de Acosta y la Banda Municipal de San Mateo. A las 7:00 p.m., la mezcla de ritmos y las influencias variadas que oscilan entre el folclore centroamericano, los sonidos celtas, la balada rock, el son caribeño y el jazz fusión del grupo Malpaís, deleitaron por dos horas a cientos de espectadores que se encontraban en el lugar.

“Durante 11 días respiramos la magia del Festival, de sus espectáculos y de sus artistas que nos brindaron lo mejor del arte costarricense. Esto no hubiera sido posible sin el compromiso y la alegría con que los gobiernos locales nos abrieron las puertas y nos dejaron compartir más de su identidad, su cultura y su gente. Hoy culminamos exitosamente una edición más de este Festival que es de todos y todas”, expresó Ada Acuña, directora del Centro de Producción Artística y Cultural y productora ejecutiva del FNA.

Yanette Campo y Maximina Serrano agradecieron las oportunidades que les brindó el FNA a los adultos mayores, ambas son vecinas de Esparza y disfrutaron de las presentaciones del Grupo Ticotíteres y Nakury en la comunidad de San Juan Chiquito. “En general muchas risas para nosotros que somos como chiquitos y en la niñez, juventud y vejez, no tuvimos esta oportunidad, por primera vez estamos viendo todo esto”, aseguraron.

30 años de historia

El Festival Nacional de las Artes nació en 1989 con el objetivo de “promover, difundir, fortalecer y promocionar la producción artística costarricense como actividad generadora de desarrollo, a través de la organización de festivales nacionales e internacionales multidisciplinarios”.

En su edición 2019, el Centro de Producción Artística y Cultural homenajeó a 30 trabajadores del sector artístico del país por sus aportes y contribuciones para hacer posible el Festival de las Artes de Costa Rica.

Marca País

Durante el evento de clausura, el Festival de las Artes recibió el licenciamiento como Marca País “Esencial Costa Rica”, a manos de la Promotora de Comercio Exterior (Procomer).

En sus 30 años, el evento organizado por el Centro de Producción Artística y Cultural, ha sido una ventana de exportación para los miles de artistas que participan año con año y se ha convertido en una vitrina con lo mejor del arte nacional e internacional, por lo que se le reconoce como la fiesta de arte y cultura más grande de la región.

Con este reconocimiento, el Festival se diferencia de otros eventos en virtud de su cumplimiento con los valores y estándares de la Marca País.