Casas de habitación y comercios reportan falta del líquido durante varias semanas

Playa Tamarindo, Guanacaste, Los vecinos en el sector conocido como Cerro Khun, en pleno centro de Playa Tamarindo de Santa Cruz, Guanacaste, reportan graves problemas con el abastecimiento de agua, faltante que afecta severamente este sector residencial de casas individuales con precios promedios de alrededor de $USD 200 000 a $USD 500 000 inicialmente.

La zona del Cerro Khun, que nunca se contempló como un sitio de alta densidad, se ubica en una de los lugares de mayor desarrollo de Playa Tamarindo donde en los últimos años ha crecido la construcción de establecimientos ligados al turismo; además, de residencias para alquilar o vivir de manera permanente.

En uno de los mensajes –enviado vía correo electrónico-. de una queja al Instituto de Acueductos y Alcantarillados (AYA) un vecino de Cerro Khun de 20 años, indicó que el 19 de febrero él ya sumaba 10 días sin tener el servicio de agua potable.

Por su parte, Roger De Brick, lamentó que a pesar de la escasez del líquido en la zona, el AYA continúa otorgando cartas de disponibilidad de agua y la Municipalidad de Santa Cruz permanece entregando permisos de construcción cuando no se puede suministrar agua a los usuarios existentes.

“Específicamente en lo que respecta a la cima del Cerro Kuhn, es increíble que un grupo empresarial haya logrado obtener permisos de construcción (y agua) para un gran proyecto de condominios en la cima de la colina sin ninguna evaluación del impacto sobre los residentes existentes y sin ninguna evaluación del impacto sobre la infraestructura que no puede sostener un proyecto de este tipo”, añadió De Brick.

Crecimiento descontrolado

En la zona del Cerro Khun en la actualidad se llevan a cabo tres proyectos inmobiliarios de grandes proporciones a pesar de que desde el año pasado se reportan grandes dificultades con el suministro de agua potable.

“Uno de los problemas con el agua en la colina surge del hecho de que grandes hormigoneras y camiones de suministros suben y bajan constantemente por una carretera esencialmente de un solo carril. Estos camiones rompen repetidamente las tuberías existentes que se encuentran debajo de la carretera. Siempre hay grandes fugas debido a tubos rotos y, a menudo, se rompen el mismo día que las reparan de la reparación”, añadió De Brick.

Los problemas con las constantes faltas del líquido obligó a los vecinos y negocios locales a gastar grandes cantidades de dinero en la contratación de camiones cisterna que entregan agua potable.

“Durante la semana pasada pagamos mucho dinero por el agua, durante la mañana, había un camión en la casa de mi vecino a las 10 de la noche y un camión al otro lado de la calle entregando agua a las 6 de la mañana. Nos hemos puesto en contacto muchas veces con el AYA para denunciar la falta de agua, al igual que nuestros vecinos. Siempre que podemos comunicarnos con el Centro de Llamadas del AYA, nos dicen que no han recibido ningún informe local de que haya algún problema. Hemos escuchado desde empleados que trabajan en el área que: tuvieron que cerrar el agua para reparar fugas o que alguien cerró la válvula. Hemos oído la historia de la válvula varias veces; si esto es cierto, la pregunta es: ¿por qué la válvula está al alcance de cualquiera sin ninguna protección? La historia es increíble”, relató De Brick.

Por su parte, representantes de Compass House y Casa Leo Loco en Calle Soles, calificaron el servicio al cliente del AYA como “incompetente”.

“A finales del año pasado nos quitaron el medidor dejándonos sin suministro de agua ni ninguna explicación. Esto nos costó miles de dólares en servicios de camiones cisterna. Se negaron a comunicarse y cuando lo hicieron nos acusaron de uso excesivo del agua y luego de no pagar nuestras facturas de agua, todo lo cual es falso y puede corroborarse”, señaló señalaron los representantes de esas empresas situadas en Cerro Khun.

En el caso de negocios de alojamiento como Casa Catalina, durante las últimas semanas ha llegado a sumar 27 días sin agua inconveniente que afecta a otras cinco residencias aledañas; no obstante, los múltiples llamados al número 800 del AYA.