En Costa Rica, mediante el Ministerio de Ambiente y Energía (MINAE), se ha dado acompañamiento, generando acercamientos, supervisando procesos y apoyando a las empresas con las que se trabajan estos proyectos, garantizando que la inversión sea aprovechada apegada a las leyes ambientales del país.
“La colaboración tripartita que se hemos trabajado en conjunto con el Gobierno de República Dominicana y el Gobierno Alemán, ha rendido frutos tangibles en nuestro país. La promulgación del decreto 41.774 para la protección y conservación de ecosistemas coralinos es un claro ejemplo de cómo podemos generar buenas prácticas y convertirlas en políticas públicas dirigidas a cumplir con el objetivo de procurar mares sanos, productivos y resilientes para el mundo. Nos emociona mucho el trabajo que se realizará en los próximos años y los grandes avances en materia de soluciones basadas en la naturaleza que podremos ver.”, expresó Haydée Rodríguez, Viceministra de Agua y Mares de Costa Rica.
El trabajo con el sector privado se ha realizado por medio de alianzas público-privadas que han permitido transferir conocimiento especializado proveniente de las empresas en cada sector en el que se ha trabajado y que han generado resultados en diferentes niveles.
“Estas acciones son muy diversas y se han realizado en empresas de pequeña y gran escala, de los sectores de turismo, agricultura, servicios e industria. Un ejemplo de estas medidas es el desarrollo de una alianza público-privada liderada por Península Papagayo, en cooperación con el SINAC-MINAE, Raising Corals, el CIMAR y la GIZ para la restauración de arrecifes de coral en el Guanacaste”, explicó Svenja Paulino, directora del Programa Biodiversidad y Negocios de la GIZ.
A la fecha, gracias a la acción del sector privado más de 100 pequeños productores de piña, abacá, macadamia y banano dirigido al mercado europeo, han implementado mejores prácticas productivas en beneficio de la biodiversidad.
“Durante estos seis años, hemos puesto a disposición de las empresas y redes en la región más de 11 instrumentos financieros y diferentes herramientas para mejorar la gestión de la Biodiversidad, como el Biodiversity Check en los sectores de turismo y agricultura, drones para uso agrícola u otros que han sido ya utilizados por al menos 300 empresas o productores de la región”, añadió Paulino.
Estos resultados fueron presentados este 4 de febrero en Punta Cana, República Dominicana en un encuentro regional y han sido posibles gracias al apoyo que brinda desde el 2014 el Gobierno Alemán a la región Centroamericana y la República Dominicana para la integración de la biodiversidad en la gestión empresarial, en conjunto con la Comisión Centroamericana de Ambiente y Desarrollo (CCAD), por encargo del Ministerio Federal Alemán de Cooperación Económica y Desarrollo (BMZ).