Cortesía de Andrés Barrantes. El refugio de Vida Silvestre Cipancí, ubicado entre los cantones de Nicoya y Cañas, comprende la mayoría de áreas de manglar y los espejos de agua del río bebedero hasta
la confluencia del río Lajas; así mismo, desde la Isla del Toro en la desembocadura del río Tempisque hasta la influencia de las mareas, en Bolsón y Ortega.
Cristian Chaves UNA Sede Regional Chorotega
El Centro Mesoamericano de Desarrollo sostenible del Trópico seco (Cemede) de la sede regional Chorotega, en conjunto con la Escuela de Ciencias Ambientales de la Universidad Nacional (UNA), promueven el desarrollo de capacidades comunitarias para la valorización de recursos locales, culturales, agrícolas, ecológicos y paisajísticos, a través de un modelo de turismo activo que mejore la oferta turística y el aumento de la resiliencia del sector ante el cambio climático en la cuenca media baja del río Tempisque para el periodo 2023 al 2025.
De acuerdo con José Andrés Barrantes, académico y extensionista del Cemede,“ la propuesta promueve un proceso articulado en el cual participan organizaciones de base local y pymes de la cuenca media baja del río Tempisque como Asociación Agroecoturística Loma Larga, ADI de Bolsón, INProTUr, Danissa Tours y etnotourismTempisque Adventure”.
Además, contempla acciones con el refugio de vida silvestre Cipancí, como parte del Área de Conservación Tempisque, la Municipalidad de santa Cruz, como gobierno local y el apoyo de dos organizaciones no gubernamentales: LarutadelClimayFundaciónGeográfica de Costa rica.
Al respecto, ya el Concejo Municipal de santa Cruz emitió un pronunciamiento oficial unánime, mediante el que se acuerda dar apoyo a esta propuesta.
Ejecución del proyecto
La ejecución de esta propuesta se desarrollará en cinco fases: Caracterización del contexto de la zona y sus recursos turísticos, Promoción de capacidades comunitarias en los actores claves, sensibilización y educación sobre buenas prácticas ambientales y acciones climáticas, Promoción de acciones dirigidas a la sostenibilidad de las acciones ambientales y climática y sistematización.
Tonny Ruiz, administrador del refugio de vida silvestre de Cipancí, destacó la importancia de alfabetizar a la población en varias áreas propuestas por el proyecto, y así exponer de una mejor forma la riqueza cultural y biodiversidad de las comunidades. “Las cuencas media y baja del Tempisque son una fuente de empleo y desarrollo por la oferta de servicios turísticos y agroalimentarios; es decir, los proyectos como estos vienen a corregir las deficiencias del sector, así como a formar mejores personas para resguardo ecosistémico y desarrollo de los pueblos”.
Según indicó Ruiz, el estuario del Tempisque lo visitan cerca de 15.000 turistas por año y si bien esto le permite a muchas personas generar recursos, aún hay quienes necesitan herramientas para dar el paso en los procesos de integración a la economía local y contribuir con la reactivación económica de la zona.
“Las expectativas son altas, puesto que se basan en el trabajo con personas que quieren que sus pueblos se desarrollen de la mejor manera y esperan un aliciente para seguir avanzando en procesos comunales y resguardo de la naturaleza”, finalizó Ruiz.