72 pacientes diarios, de todo el país son atendidos para cirugías ortopédicas, consultas en medicina física y rehabilitación, entre otros servicios.
El objetivo es que los pacientes referidos recuperen su calidad de vida y puedan reincorporarse a las actividades cotidianas rápidamente, mediante terapias físicas y ocupacionales que ahora ofrece en horario vespertino el Centro Nacional de Rehabilitación (CENARE).
Se trata de un nuevo proyecto que se inscribe dentro de Plan de Atención Oportuna que tiene en ejecución la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) para mejorar la oportunidad, la calidad de la atención y aprovechar la capacidad instalada institucional en diferentes puntos del país.
Este Plan de Atención Oportuna se está desarrollando en todo el territorio nacional y tiene múltiples líneas de acción y en este caso, según lo puntualizó el doctor Roberto Aguilar Tassara, director del CENARE, este centro especializado está realizando jornadas de producción en cirugía ortopédica, consultas de medicina física y rehabilitación o fisiatría, terapias físicas y ocupacionales y adicionalmente, equipos de médicos del CENARE están ofreciendo consultas los fines de semana en otros hospitales alejados como el Fernando Escalante Pradilla de Pérez Zeledón.
En ese horario especial, que arranca a partir de las 4 de la tarde asisten pacientes de diferentes establecimientos de salud del país y funciona de lunes a sábado.
Las terapias vespertinas
La licenciada Patricia Vargas Ávila, jefa del servicio de Terapia del CENARE, explicó que las terapias vespertinas, se ofrecen a pacientes referidos especialmente, de establecimientos de salud del área metropolitana y de los hospitales San Rafael de Alajuela y San Francisco de Asís en Grecia.
Se trata de pacientes que han tenido lesiones producidas por accidentes de tránsito u otros traumatismos, caídas o enfermedades como cáncer, Guillain Barré y accidentes vasculares cerebrales.
La jefa del servicio de terapia informó que los pacientes son sometidos a un promedio de ocho sesiones de terapia y se llevan la recomendación de que ejecuten los ejercicios en el hogar para que haya mayores beneficios.
En la primera sesión el paciente es valorado por la terapeuta para establecerle el plan terapéutico que se debe seguir. En esta valoración el profesional determina si la persona necesita compresas frías, calientes, parafina, estimulación eléctrica, ultrasonidos, presoterapias, entre otras.
También se valoran los ejercicios que debe hacer el paciente, según el objetivo terapéutico. Por ejemplo, los pacientes son sometidos a ejercicios para mejorar la resistencia, se trabaja la fuerza muscular, el equilibrio, la movilidad de las articulaciones, la estabilidad, el movimiento y la coordinación.
Como parte de los programas terapéuticos que ofrece el Centro Nacional de Rehabilitación, los pacientes sean reentrenados en actividades de la vida diaria como vestirse, levantarse de la cama, aprovechar el potencial de una extremidad porque la otra se perdió, entre otras actividades. Lo que busca el CENARE es que la persona se inserte de la mejor manera a la vida, familiar, social, educativa y productiva.
También hay entrenamientos para andar en silla de ruedas y aprender a desplazarse con alguna ayuda. Otro de los objetivos es que el paciente realice terapias ocupacionales y con ese propósito se trabaja con herramientas pequeñas como plasticina, legos entre otros materiales, adicionalmente, se trabaja la higiene postural de los pacientes.
De acuerdo con el doctor Aguilar, estas múltiples acciones procuran no solo reducir los tiempos de atención, sino también ofrecerle al paciente un abordaje completo e integral y resolverle sus necesidades de atención.