La constante y acelerada evolución de las sociedades y economías globalizadas traen consigo una alianza directa con las tecnologías digitales, esenciales para el crecimiento o disminución de la brecha digital.

Según el Viceministerio de Telecomunicaciones, en Costa Rica, la diferencia de posibilidad de acceso existe entre quienes tienen o no acceso a las Tecnologías de Información y Comunicación (TIC), entre quienes saben cómo utilizarlas y entre quienes las utilizan pero reciben diferentes niveles de calidad.

Según el último Índice de Brecha Digital (IBD) 2006-2016, la evolución del IBD en el país durante ese lapso de tiempo, presentó una tendencia decreciente, con una disminución de 56%. Año tras año, desde la apertura del sector de las telecomunicaciones en el 2008, el índice ha presentado una disminución promedio anual de 9 puntos porcentuales.

Dicha apertura posibilitó la reducción de la brecha digital en Costa Rica en especial por el incremento de líneas de telefonía móvil, pasando de 43 líneas por cada 100 habitantes en el 2008 a 170 líneas por cada 100 habitantes para el 2016; además por el aumento en el número de cuentas a Internet para velocidades mayores a 512 Kbps, y las cuales pasaron de 5 por cada 100 habitantes para el año 2008 a 97 por cada 100 habitantes en el 2016.

Isabel Román, Coordinadora general de investigación del Informe Estado de la Educación, indicó que existe una importante brecha de acceso a los medios digitales en zonas rurales y urbanas y según su condición económica social. “Cuando se analiza la población de 5 a 18 años, hemos observado que el 80% de hogares con mejor condición económica tiene una conexión a internet a diferencia de los hogares pobres, los cuales solamente el 37% tiene ese acceso. Cuando se profundiza en esos más pobres se encuentra que un 48% de esos hogares solo pueden comunicarse a internet por medio del celular y el 10% no puede conectarse de ninguna forma”, comentó Román.

Según el XVIII Informe del Estado de La Nación 2012, la diferencia de tenencia de tecnologías entre la zona urbana y rural es del doble, en la cual la zona urbana se ve favorecida.

El estudio reveló que para ese entonces un 56,4% de la población urbana contaba con televisión por cable frente a un 17,2% de zona rural. Dicha diferencia es aún mayor con el porcentaje de viviendas con conexión a Internet, por ejemplo en la Zona Norte como La Cruz el 15% de viviendas están conectadas.

Otros datos indican que Costa Rica tiene un 32,8% de viviendas que poseen una computadora de escritorio y un 33,5% de ellas tienen Internet.

El XVIII Informe destaca que la posibilidad de acceso a la tecnología está enfocada en la zona geográfica en donde se ubica (factor determinante para las TIC), y que no depende del tipo de vivienda, es por ello que es común observar que hasta en viviendas de muy bajas condiciones socioeconómicas como precarios urbanos, cuentan con acceso a internet y televisión por cable.  Sin embargo, en cuanto a la tenencia de computadoras, el estudio indica que el 45,3% de los hogares del país utilizados para la muestra cuentan con un computador, pero de ellas solo un 33,6% tiene conexión a Internet.

Los expertos destacan como los retos más importantes por enfrentar el tema de educación, no en cuanto a acceso sino también al incentivar la utilización de dicha tecnología para una mejora de sus capacidades y calidad de vida, pero además a que haya un equilibrio en cuanto a la alta demanda de velocidades de traslado de datos e internet y del despliegue de infraestructura sin que los ciudadanos se opongan a su desarrollo.