Fundación MarViva en alianza con el Banco Nacional reitera su compromiso para apoyar a los pescadores de aquellas comunidades con las que trabaja la ONG en Costa Rica. En esta ocasión se hizo entrega de 330 paquetes de alimentos, que se distribuyeron con el apoyo de la Municipalidad de Nicoya y el Instituto Costarricense de Pesca y Acuicultura (INCOPESCA) en 12 comunidades del Golfo de Nicoya.
“En Fundación MarViva desde que inicio la pandemia del coronavirus hemos estado trabajando para apoyar al sector pesquero, con esta nueva entrega estamos impactando ahora, a 330 familias de pescadores que no han recibido ninguna ayuda durante esta emergencia mundial. Agradecemos una vez más a las instituciones y empresas que se han sumado a nuestra iniciativa para apoyar al sector” comentó, Félix Fonseca Fonseca, Coordinador de Comunidades de Fundación MarViva.
En la entrega de alimentos se beneficiaron a familias de las comunidades de Isla Chira, Sonzapote, Puerto Moreno, Copal, Pochote, Puerto San Pablo, Puerto Thiel, Costa de Pájaros, Colorado, Puerto Jesús, Puerto Níspero y San Buenaventura.
“La aparición del COVID-19 ha venido a recrudecer la situación que viven muchas familias a lo largo del territorio costarricense. Particularmente figuran las familias que viven de la pesca o el turismo, quienes están padeciendo los debacles causados por la suspensión de sus actividades productivas. En ese marco y de acuerdo con la estrategia de sostenibilidad del Conglomerado Financiero Banco Nacional, hemos puesto en marcha el proyecto Visitas de Solidaridad, el cual busca reactivar las economías de algunas comunidades que requieren una injerencia inmediata. Primeramente tratamos de solventar una necesidad básica como lo es la alimentación de las familias, mediante la entrega de un diario. Posteriormente y es lo fuerte del proyecto, entramos a trabajar con las comunidades mediante la planeación y formulación de un proyecto productivo, el cual les permita reactivar la economía local y con el avance de éste, fomentar el ingreso de las personas económicamente activas a la economía formal del mercado donde se desenvuelven. De esta manera procuramos mejorar el bienestar y la calidad de vida de los habitantes de las comunidades beneficiadas, así como construir una especie de blindaje que les permita ser sostenibles ante crisis como las que estamos atravesando”, según indicó Silvia Chaves, jefa de Sostenibilidad del Banco Nacional.
