La CCC planteó mediante una carta enviada al mandatario de la República de Costa Rica, sus preocupaciones en torno a la situación que está enfrentando la construcción, al ser uno de los más golpeados por la situación económica existente producto de la pandemia.
Los datos más relevantes son:
La actividad económica de la construcción muestra tasas decrecientes de diciembre 2018 a abril 2020 (último dato publicado), lo que representa 17 meses consecutivos de caída. En abril 2020 el IMAE construcción decreció 11,4% de forma interanual, producto de una reducción de 13,8% en la construcción con destino público y de 8,8%, en la construcción con destino privado.
En el 2019, el sector construcción mostró el peor comportamiento de todas las actividades económicas del país, decreciendo un -10,7%. Adicionalmente, según las proyecciones del Banco Central, durante el 2020 la industria de la construcción será la segunda con el peor resultado, decreciendo un -8,7%.
De acuerdo con los datos más recientes publicados por el INEC para el sector construcción, entre el II trimestre de 2018 y el I trimestre de 2020, la cantidad de ocupados se redujo en 28.292 empleos. Es importante indicar que estos datos no contemplan el efecto del COVID-19.
Los metros cuadrados tramitados ante el CFIA para la construcción de edificaciones, acumulados de enero a abril 2020, han mostrado un decrecimiento de 11,6% con respecto al mismo periodo del año anterior. Los metros cuadrados acumulados a abril 2020, muestran el nivel más bajo desde el 2011 para ese periodo.
El Presidente de la CCC, Esteban Acón reiteró también que el sector construcción es un motor fundamental de la actividad económica del país e importante generador de empleo: representa el 32% de la cartera del Sistema Bancario Nacional entre créditos de vivienda y construcción y tiene un elevado poder de arrastre en otras actividades económicas vinculadas.
Asimismo, la construcción es el cuarto sector en importancia en generación de empleo directo, sumando el 13% del empleo nacional entre ocupados directos e indirectos, generando oportunidades laborales para todos los niveles de ingreso y especialmente para los trabajadores más vulnerables.
Ante la difícil situación que afronta el sector y su relevancia como reactivador de la economía nacional, el representante de la Cámara indicó que resulta impostergable que, de inmediato, el Gobierno de la República tome medidas urgentes, con resultados cuantificables en el corto plazo y acordes a la gravedad de la crisis que afrontamos, para atender las necesidades específicas de la construcción y del país.
“Al respecto la CCC le ha presentado a usted y a varios de sus ministros, en múltiples oportunidades -tanto en reuniones, como por medio de oficios-, amplias y detalladas propuestas concretas de medidas para afrontar el efecto de la desaceleración económica, evitar que la crisis se profundice y aumentar la confianza de los inversionistas y consumidores.
No obstante lo anterior, a pesar de las propuestas presentadas, hasta el momento el Ejecutivo no ha implementado una verdadera agenda de reactivación y se echa de menos una mayor coordinación que nos lleve a resultados concretos. Más aún, se percibe un alto grado de desorganización, que ha dejado de lado la salud económica del país, propiciando un desempleo y un déficit fiscal que crece día con día y que agobia a todos los costarricenses.
El no tener una agenda de reactivación dificulta la toma de decisiones por parte de los diversos actores económicos generando más incertidumbre, lo que a su vez tiene como consecuencia una mayor paralización de la actividad económica.
Los proyectos de infraestructura pública que se han propuesto siguen su ritmo normal, sin que se denote un sentido de urgencia; ya la moratoria del pago de los créditos hipotecarios por parte de la mayoría de los bancos ha vencido, sin que podamos entender que acciones concretas se tomarán con las personas que han perdido su trabajo o sufren una disminución de jornada y peor aún, hay una ausencia total de un plan para impulsar e incentivar la compra de vivienda para la clase media.
Siendo honestos, en materia de trámites las cosas no han mejorado sustancialmente, lo que incrementa el desinterés por propiciar obras de construcción nuevas en el país, aunado a instituciones como el AyA, cuya gestión es un verdadero desastre. La gestión actual del AyA obstaculiza sensiblemente el desarrollo del país.
En esta institución el análisis de la situación y las medidas de corrección, no se toman con la prontitud que la situación amerita y más bien se atenta contra la libre competencia y las finanzas del país al realizar un acuerdo con el ICE, para la construcción de la ampliación del acueducto de Orosí, mientras cientos de empresas constructoras tratan de sobrevivir ante la falta de trabajo. Para terminar, estamos a una semana de que arranque la aplicación generalizada del IVA en los servicios de construcción, encareciendo sensiblemente el costo de la vivienda, pero pareciera que eso no lo ven ustedes como un problema, ante el panorama que afrontamos.
Como lo hemos venido reiterando, la indiferencia hacia la situación del sector construcción, ya está poniendo en peligro una gran cantidad de empleos, principalmente de personas con bajos niveles de escolaridad, lo que vendría a acrecentar el grave problema social que ya está afrontando el país. Por esta razón le solicitamos nos indique cuáles son las acciones concretas que implementará su Gobierno para atender la inminente profundización de la crisis que se avecina para el sector construcción y evitar un mayor impacto en la población”, texto literal de la carta enviada.