Uno de los dolores de cabeza que enfrenta a los nicoyanos, cada vez que muere una persona, es conseguir un lugar en el cementerio de Nicoya, ya que no hay tumbas para tanta gente, debido éste cumplió su vida útil desde hace 26 años.
Periódico Mensaje
Uno de los dolores de cabeza que enfrenta a los nicoyanos, cada vez que muere una persona, es conseguir un lugar en el cementerio de Nicoya, ya que no hay tumbas para tanta gente, debido éste cumplió su vida útil desde hace 26 años.
Uno de los dolores de cabeza que enfrenta a los nicoyanos, cada vez que muere una persona, es conseguir un lugar en el cementerio de Nicoya, ya que no hay tumbas para tanta gente, debido éste cumplió su vida útil desde hace 26 años.
La realidad es que en este cementerio ya no cabe “ni un alma más”, en él hay tumbas que datan de 1891.
En la actualidad, cuando se necesita enterrar a una persona en este sitio, empieza una verdadera odisea para Orlando Madrigal, encargado de la Municipalidad, ya que le lleva buen tiempo buscando un sitio, pues hasta los pasillos están llenos de tumbas.
“Esta situación es difícil, a veces tengo que estarme peleando con la gente, porque cuesta encontrar campo, esto es angustiante. De hecho este cementerio desde hace tiempo está con cierre técnico por este mismo problema, pero mientras no se tenga otro sitio, uno se la debe ingeniar”, manifestó Madrigal.
Actualmente, no hay panteonero, sino que tienen destinado a un empleado del área sanitaria en el lugar. El costo por el derecho a un espacio, el cual es imposible de encontrar es de 3 500 colones.
Si bien es cierto, la apertura de otros cementerios en los alrededores ha disminuido la demanda, ello no ha sido suficiente, en donde este es el único cementerio en el casco urbano de Nicoya, no obstante, en lugares aledaños están los cementerios de Caimital, San Antonio, Sabana Grande y La Mansión.
Finalmente y después de varios intentos fallidos, la mayoría de regidores municipales, se pusieron de acuerdo y dieron luz verde, para continuar con el proceso de compra del terreno donde estaría el nuevo cementerio municipal.
Durante la sesión municipal del pasado 28 de abril de 4014, Santos Juárez, Presidente de la Comisión Pro Cementerio, presentó el plan visado y actualizado de la propiedad que pretende comprar la Municipalidad.
Al respecto, Marco Jiménez, Alcalde de Nicoya, indicó que el cierre técnico de este cementerio debió haberse hecho desde 1988, y máximo en el 2001 en su totalidad, pero aún en 2014, este tema representa problemas. “A pesar de la urgencia del nuevo cementerio en el Concejo; los regidores Carlos Medina y Ana Lizeth Espinoza y alguna gente de la comunidad cercana donde se ubica el lote, para construir el cementerio, no quieren y se oponen, además de otros intereses económicos que hay de algunos actores”.
El terreno que se pretende comprar con ese fin está ubicado en el sector suroeste de la ciudad, detrás del Estadio, exactamente, entre el Monte de la Cruz y barrio Cananga. En total son 3 hectáreas, que tienen un costo de 216 millones.