Obtener un "pacto moral" entre padres e hijos para no dejar caer la producción e incrementar a la vez los niveles de cosecha de arroz, fue el argumento que se trató de inculcar a los más de 150 productores e industriales que participaron en el XV Congreso Nacional Arrocero 2019, organizado por la Corporación Arrocera Nacional (CONAROZ).
Mediante talleres y charlas motivacionales e informativas, esta nueva edición, se enfocó en la realidad económica que vive el sector y los nuevos retos que deberá asumir para sacar adelante la producción, fomentando a la vez la unión familiar y la integración de las nuevas generaciones para su éxito.
Según Eduardo Rojas Villalobos, Presidente de CONARROZ, son muchos los desafíos que desde hace muchos años atrás se deben de afrontar. En el 2014 con la firma del Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos, se abrió la brecha de comercialización, con aranceles que al día de hoy en un 23%, y que según el funcionario seguirán bajando, por lo que uno de los retos es mejorar el rendimiento y el costo de producción de la tonelada de arroz por hectárea.
“También está el tema de la globalización, en donde el arroz a nivel mundial es un producto subsidiado. Aquí vienen arroces de Uruguay, Paraguay y Argentina, por ejemplo, y el productor nacional debe estar preparado para competir con todos estos sectores por muchos años más. A esta situación se le puede hacer frente mediante estrategias como la del relevo generacional”, comentó Rojas.
Pero, ¿qué es exactamente el “Relevo Generacional”?
Un estudio realizado por la Universidad Técnica Nacional (UT), reveló que actualmente en el país, un 85% de los productores tienen más de 40 años, y en sus familias, únicamente el 20% de sus hijos, tiene interés de mantenerse en la actividad.
Estos datos representan un problema para el sector, ya que, como repercusión, el productor arrocero iría desapareciendo poco a poco así, como la actividad económica de la cual depende un gran porcentaje de agricultores.
Una forma de contrarrestar esta situación,es desarrollar el “Relevo Generacional”, en los agricultores, quienes se han dedicado a esta actividad durante muchos años. La idea es que sus hijos se puedan insertar dentro de este mercado, con el fin de que se prolongue el negocio familiar y se combinen novedosos conocimientos de tecnología adquirida por las nuevas generaciones, y así traducir el negocio en mejores costos y mayor producción.
Rodney Cordero Salas, Decano de la sede de Atenas de la UTN, comenzó con esta iniciativa al ver que los sectores productivos del país en general estaban convulsionados. Por lo que comenzó a trabajar en un proyecto para que hubiese un salto de empleabilidad en los estudiantes, llamado “Relevo Generacional”, para integrar a las nuevas generaciones con una mentalidad de doble vía, en beneficio del crecimiento de los diversos negocios.
Hasta el momento se ha capacitado a más de 3000 productores en el país.
¿Qué hacer para que la mayoría se integre a ese relevo?
“Deben ver la rentabilidad del negocio, el relevo no pasa de la noche a la mañana los relevos deben comenzar desde que los hijos de los productores son niños, no es que les cambien la mentalidad, sino que se enamoren de la actividad mediante la participación, las responsabilidades y que colaboren con nuevas ideas y proyectos que hagan que se emocionen con la actividad productiva”, explicó el Decano.
Cordero agregó además que “Si no existe este espacio o motivación familiar, un negocio no puede incentivarse. Este es un proceso que se lleva 10 o 20 años. Los padres de familia deben aprender a delegar a sus hijos o bien a otros jóvenes, y pensar en que tengo relevos preparados, profesionales jóvenes, que quieren y pueden asumir ese reto”.
Guanacaste al ser una zona altamente afectada por las sequías y por ende su producción, ¿cómo se puede motivar a las nuevas generaciones a seguir con la actividad?
Según comentó el Presidente de CONARROZ, se está presionando al Gobierno para que conozca sobre la necesidad de desarrollar distritos de riego en la provincia, como una solución pronta y efectiva, mediante la aprobación de los proyectos de riego del Canal del Sur que llega hasta las Juntas de Abangares, y el otro canal de Santa Cruz, con los que se estaría irrigando 8000 hectáreas de arroz adicionales.
“Ahí está la motivación para nuestros productores de la provincia. El riego es vida, y donde hay agua hay vida”, detalló Rojas.
Como respuesta a la petición de los arroceros, Nitz Solórzano, Director Nacional de Extensión Agropecuaria del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), indicó que a pesar de que no existen todos los recursos necesarios para levantar la actividad de manera más pronta, se está levantando la información de campo en todas las regiones del país dónde ha habido déficit hídrico como lo es Guanacaste, para poder dotar de tecnología y nuevas alternativas de siembro a los productores y