Por Dra. Mauren Navarro Castillo, Directora de Programas Comunitarios,
Mission Activation Charity, Carrillo, Guanacaste, Costa Rica.
En los últimos años, con el desarrollo de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC´s), hemos visto un crecimiento exponencial en la demanda de recursos humanos altamente preparados en temas relacionados con esa área que es indispensable para el desarrollo de cualquier país.
La amplia aplicación de herramientas como la inteligencia artificial, la robótica y la digitalización de los procesos que antes se realizaban de manera presencial, necesita de personal debidamente capacitado en las áreas de Ciencias, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas (STEM, por sus siglas en inglés).
No obstante, el caso de las mujeres en casi todos los países aún existe una brecha de género que impide la participación de ellas en este tipo de profesiones. Incluso en el año 2020 la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, estableció que menos del 30% de las personas investigadoras científicas eran del sexo femenino.
Aporte local
Superar esas barreras es una tarea de largo plazo, sin embargo, en el cantón de Carrillo (provincia de Guanacaste, Costa Rica), hemos dado pasos en esa dirección con la organización de dos encuentros que llamamos “Misión Carrillo”, dirigidos a niñas estudiantes de sexto grado.
El primer encuentro Mission Carrillo 2022 contó con una presencia de 155 niñas, y el 26 de mayo del presente, logramos reunir a un grupo de 180 niñas de las escuelas de Artola Hermosa, Obandito, Santa Rita, Playas del Coco, Ignacio Gutiérrez (San Blas), Libertad, Playa Hermosa, Palmira, Paso Tempisque, Pacífica Fernández, Cacique y Bernardo Gutiérrez.
Las niñas que participaron en esta iniciativa en STEM se involucraron en activas mesas lúdicas por parte de la Escuela de Ingeniería Mecánica de la Universidad de Costa Rica, la Academia Nacional de Ciencias, el Ministerio de Educación Pública (MEP), el Colegio Federado de Ingenieros y Arquitectos (CFIA), el Instituto Tecnológico de Costa Rica (TEC) y el Laboratorio Nacional de Nanotecnología del Centro Nacional de Alta Tecnología.
Gracias al apoyo de esas instituciones y de la Fundación Mission Activation Charity, que patrocinó todo el evento, el Centro Comunitario de esa Fundación se convirtió en un escenario perfecto para que alumnas de primaria de escuelas del cantón de Carrillo –y zonas aledañas- conocieran de mano de personas expertas, la belleza de la ciencia y tecnología, así como su impacto en la sociedad actual; además, de incentivar en ellas la inclinación hacia ese tipo de profesiones.
La organización de esta clase de encuentros nos encamina hacia un modelo de educación más inclusivo, alejado de la discriminación de género, pero sobre todo representan un grano de arena en la tarea de construir un país más justo y solidario con las mujeres.