Costa Rica pone a disposición de comunidad científica el modelo que hizo posible la devolución de 36.000 conchas a su lugar de origen
Modelo de código abierto surgió como parte de las acciones desarrolladas para el proyecto “De Vuelta a Casa”, que tiene como objetivo mitigar el impacto causado por la recolección de conchas y restaurar el equilibrio ecológico en las playas costarricenses
- Modelo de código abierto surgió como parte de las acciones desarrolladas para el proyecto “De Vuelta a Casa”, que tiene como objetivo mitigar el impacto causado por la recolección de conchas y restaurar el equilibrio ecológico en las playas costarricenses
Para mitigar el impacto ambiental de la extracción masiva de conchas marinas, FIFCO con su marca Imperial desarrolló, en colaboración con la Universidad de Costa Rica, la primera aplicación basada en inteligencia artificial capaz de identificar el origen de las con[1]chas con solo una fotografía y garantizar su correcta devolución. Tras reintegrar con éxito más de 450 kilos de conchas y reconociendo que esta problemática trasciende fronteras, la compañía anunció que su modelo será código abierto, lo que permitirá que otros países adapten la tecnología a sus necesidades locales.
Esta herramienta es parte de “De Vuelta a Casa”, una iniciativa de la marca frente al problema de la extracción de conchas en Costa Rica, con hasta 6 toneladas incautadas anualmente en aeropuertos, impidiéndoles cumplir su rol fundamental en el bienestar de los ecosistemas marinos. Estas no podían ser devueltas por el riesgo de afectar ecosistemas al desconocer su origen. Gracias a este modelo, la supervisión constante, un riguroso proceso de limpieza y 200 voluntarios, se logró devolver una cantidad importante.
“Este proyecto no solo refleja nuestro compromiso con la sostenibilidad, sino que también coloca a Costa Rica como líder mundial en innovación tecnológica para la conservación marina. Además de promover un enfoque colaborativo que permite escalar el impacto del proyecto “De Vuelta a Casa”, democratizando el acceso a la tecnología y facilitando la protección de la biodiversidad marina a nivel global”, subrayó Maria Pía Robles, directora de Relaciones Corporativas de FIFCO
¿Cómo funciona el código abierto?
La herramienta está diseñada únicamente para Costa Rica, ya que este modelo se entrenó con más 18.500 fotografías de 525 especies que habitan en las costas del país, distribuidas: 278 del Caribe y 247 del Pacífico, con un promedio de 30 a 40 imágenes por especie. No obstante, esto puede ser modificado para adaptarse a otras especies.
La comunidad científica de cada país podrá desarrollar su propia herramienta. La compañía pone a disposición el modelo entrenado, sus pesos, la arquitectura y una base de datos. Con este recurso, se espera que puedan generarse nuevos modelos de clasificación de imágenes y que más países logren entrenar sus propios sistemas para identificar conchas marinas.
Respecto al uso de la aplicación por parte de la población en general, Murillo agregó: “Sabemos que muchas personas quieren devolver las conchas que tienen en su hogar y valoramos mucho su preocupación, sin embargo, les pedimos guardarlas por el momento, ya que aún conociendo su lugar de origen, el proceso de limpieza y preparación de las conchas debe ser supervisado por expertos. Estamos trabajando en una solución que les permitirá devolverlas, esperamos pronto darles más noticias”.
Con el propósito de generar concienciación y acción
El impacto del proyecto “De Vuelta a Casa” no se limita a la tecnología. El documental con este mismo nombre, producido por Imperial en colaboración con aliados estratégicos, busca educar al público sobre la importancia de las conchas marinas y fomentar prácticas responsables. Así, FIFCO hace un llamado a turistas y costarricenses a convertirse en embajadores de la biodiversidad marina, recordando que cada concha es esencial para la salud de los ecosistemas costeros.