Por Erika Fernández Cordero / Periodista
- Manejo de suelo, utilización de residuos orgánicos, eficiencia en uso del agua, bienestar animal, protección de la biodiversidad, eficiencia en el uso de agroquímicos, reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, desarrollo de la agricultura familiar, relación producción-consumo, entre otros, son parte de las mejoras que comprende el sector.
Este año, un total de 49 empresas agropecuarias de la Región Chorotega han logrado izar la Bandera Azul Ecológica (BAE) en la categoría de Fincas Agropecuarias, un distintivo que premia sus esfuerzos en sostenibilidad ambiental. De estas empresas, 18 lo han obtenido por primera vez, lo cual refleja un avance significativo en las prácticas de manejo responsable de los recursos naturales en el sector agropecuario en la provincia. La entrega oficial de las banderas se realizó el pasado 5 de setiembre.
La Región Chorotega, caracterizada por su diversidad productiva, incluye actividades ganaderas, avícolas, porcinas, hortalizas, café y frutas. Estas actividades, que se desarrollan en zonas como Cañas, Abangares, Tilarán, Nandayure, Bagaces y Santa Cruz, enfrentan el reto de integrar prácticas sostenibles que permitan proteger los recursos naturales, sin sacrificar la productividad.
Empresas galardonadas por primera vez
Entre las 18 nuevas empresas que se inscribieron en el 2023, todas lograron obtener la BAE por primera vez, lo que muestra un compromiso creciente por la sostenibilidad. En el cantón de Cañas, destaca Miela Riqueza del Bosque Seco S.R.L., mientras que en Abangares sobresalen las fincas Inversiones JORMARI J.D.J.M. S.A., Gerardo Vargas Marín, Ecofinca Tucán, Finca La Bendición, Finca Alta Vista, Finca El Retiro y Finca Integral Santa Luz.
En Tilarán, varias empresas también lograron izar por primera vez la Bandera Azul Ecológica: Lechería Santos LTDA, Finca El Establo Arenal, Finca Lomas Verdes, Ecotech Bio Farm y Tilapias Arenal. Por otro lado, en Nandayure, Melones de la Península S.A. ha sido reconocida por sus prácticas sostenibles, mientras que, en Bagaces, Ganadera Víctor Manuel del Norte y Finca El Guarumo también se unieron a este grupo de fincas comprometidas con el ambiente. Finalmente, en Santa Cruz, Tempate Springs ha sido galardonada por primera vez con este distintivo.
Avances significativos en sostenibilidad
El PBAE refleja avances concretos en áreas claves para la sostenibilidad ambiental. Según Roberto Azofeifa, director PBAE categoría fincas agropecuaria del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) las fincas han mostrado mejoras sustanciales en el manejo de suelos y la utilización de residuos orgánicos, dos aspectos fundamentales para la sostenibilidad de los ecosistemas agropecuarios. Asimismo, las fincas han avanzado en la eficiencia en el uso del agua y bienestar animal, garantizando condiciones más humanitarias para los animales que forman parte de las cadenas productivas.
Otro aspecto destacado es la protección de la biodiversidad. Las fincas han adoptado prácticas que minimizan su impacto en los ecosistemas locales, promoviendo la conservación de especies nativas. Esto se complementa con una mayor eficiencia en el uso de agroquímicos, lo que no solo reduce el riesgo de contaminación de suelos y aguas, sino que también mejora la salud de los trabajadores y de las comunidades aledañas.
La reducción de emisiones de gases de efecto invernadero ha sido otra de las prioridades del programa Bandera Azul Ecológica. Muchas de las fincas han implementado prácticas que disminuyen su huella de carbono, desde la adopción de tecnologías más limpias hasta la gestión eficiente de los desechos orgánicos, que en algunos casos son transformados en biogás o compost.
Finalmente, se ha fomentado el desarrollo de la agricultura familiar y la relación producción-consumo. Estas prácticas buscan fortalecer la soberanía alimentaria de las comunidades locales, garantizando que los productos que se generan en las fincas no solo sean sostenibles, sino que también respondan a las necesidades alimentarias de la población local.
Desafíos del programa Bandera Azul Ecológica
A pesar de los avances logrados, el programa Bandera Azul Ecológica también enfrenta desafíos importantes. Según Roberto Azofeifa, uno de los principales retos es la gestión de insumos y residuos orgánicos. Además, la responsabilidad socio empresarial sigue siendo un área en la que muchas fincas deben mejorar, especialmente en lo que respecta a la presentación de evidencias que respalden sus acciones sostenibles. En muchos casos, las fincas no logran documentar adecuadamente sus prácticas, lo que dificulta la evaluación de su desempeño ambiental.
El camino hacia un futuro más sostenible
La Bandera Azul Ecológica, más allá de ser un reconocimiento, se ha convertido en un incentivo para que las fincas agropecuarias de Costa Rica sigan trabajando en armonía con el ambiente, garantizando un futuro más sostenible para las próximas generaciones.