En los dos primeros meses del 2018, 698 conductores fueron sancionados por conducir sin llevar abrochado el cinturón de seguridad, mientras que otros 243 recibieron la misma sanción por permitir que sus acompañantes lo llevaran mal puesto. Ambas multas tienen un costo de ¢107.768,32.
Sobre este tema, en particular, el Director General de la Policía de Tránsito, Lic. German Marín Sandí, quiso recalcar ese gran detalle que muchas personas olvidan o incluso desconocen, en el sentido que en los vehículos de uso particular el cinturón es obligatorio para todos los ocupantes, no solo para quienes viajan en los asientos de adelante como se ha creído erróneamente en algunos momentos.
Este tema quedó todavía más claro con la reforma a la Ley de Tránsito de julio de 2017, cuando se estableció una multa puntual para el exceso de pasajeros en un automotor, la cual se determina según la capacidad máxima que indica los documentos del vehículo.
A estos 941 sancionados por cinturón de seguridad, se suman 281 conductores que fueron sorprendidos con el celular en la mano mientras conducían y se acreditaron una multa igual al caso del cinturón. Marín recalcó, asimismo, 37 sanciones contra conductores que llevaban personas fuera de la cabina del vehículo o en el cajón del automotor, una situación que se sanciona también tras la reforma de julio del 2017, con una multa de ¢107.768,32.
Según el director de Tránsito, esta es una buena oportunidad para volver a hacer un llamado a la prudencia en carretera. “Si bien el vehículo más mortal es la motocicleta, muchas veces mueren en manos de conductores que estaban concentrados en su celular y otras personas pudieron salvarse si hubiesen llevado el cinturón de seguridad puesto o si no hubiesen salido “volando” del cajón del carro en el que viajaban sin ningún tipo de seguridad”, finalizó el director.