La construcción de casas en madera toma fuerza por su costo, durabilidad, seguridad y por ser amigable con el ambiente.
La Fundación Costa Rica Canadá promueve la construcción de casas en madera no solo por su costo, sino por las bondades que este recurso ofrece en condiciones de terreno adverso que requieren versatilidad, resistencia, seguridad, rapidez en su edificación y porque es amigable con el ambiente; además, brinda confort, calidez y elegancia.
Kathiana Aguilar, Subgerente General de Fundación Costa Rica Canadá señaló que, aunque no existen datos de cuántas casas de madera hay construidas en el país, la madera es uno de los materiales más antiguos que se han empleado en la construcción.
“La madera es un material liviano con características que la hacen mucho más maniobrable y fácil de trabajar en cualquier terreno, pero sobre todo es muy favorable en terrenos quebrados o difíciles, como en las zonas montañosas. También, la madera ayuda a reducir la temperatura dentro de la estructura en zonas muy húmedas y calientes”, explicó Aguilar.
Además, es un material antisísmico, ya que las estructuras construidas con este material son menos rígidas, y tienen un movimiento mayor lo que las hace más resistente a los temblores, en comparación con las viviendas construidas en concreto.
“Cuando la madera es industrializada adecuadamente, es decir, cuando los procesos en los bosques, la corta, el procesamiento, el curado y la construcción de las estructuras se realizan metódicamente, la madera es un material altamente sustentable y capaz de enfrentar los riesgos de fuego, sismo, hongos, bacterias, insectos; por lo que los riesgos que comúnmente se le achacan a la madera de que no es un material seguro o duradero, pierden su argumento”, señaló la Subgerente General de Fundación Costa Rica Canadá.
Es amigable con el ambiente
Otro elemento muy importante es que construir casas de madera ayuda a mitigar efectos del Cambio Climático, ya que tiene la posibilidad de ser generado en bosques sostenibles, por lo que potencia la economía de distintas industrias sin comprometer los objetivos ambientales del país.
“La construcción con madera es altamente sostenible y en concordancia con el compromiso ambiental del país, ya que la extracción de madera de bosques plantados permite, entre otras cosas, la captura de carbono, reducir las corrientes de escorrentía, bajar la temperatura global, albergar especies de animales y aves, tanto nativas como migrantes, y ayuda a controlar el caudal de los ríos. También la madera es no tóxica y biodegradable”, detalló Aguilar.
3000 casas para indígenas
Desde sus inicios la Fundación Costa Rica Canadá ha sido pionera en este tipo de soluciones de vivienda. Ha financiado desde entonces 3000 casas de madera en poblaciones indígenas como Bratsi, Bribri, Kekoldi, Telire y Matina en Limón; Buenos Aires y Coto Brus, en Puntarenas; y Grano de Oro, en Turrialba.
Asimismo, ha intervenido otras zonas como Matambú, Alto Conte, Burica, Gavilán Canta, Telire, Alto Telire y Quitirrisí.
De acuerdo con Aguilar, la Fundación Costa Rica Canadá ha sabido identificar aspectos culturales y antropológicos de las distintas comunidades indígenas en el país, y ha sido respetuosa de sus costumbres y de sus necesidades.
“Hemos visualizado el uso de la madera como uno de los elementos fundamentales para que las viviendas sean aceptadas por las familias indígenas, considerando aspectos como baños externos, levantadas sobre pilotes y con facilidades para colgar hamacas en los diseños. Asimismo, la construcción busca estimular las economías locales, sin afectar el ecosistema”, comentó Aguilar.
Agregó que el tipo de madera, las dimensiones, la distribución física de las casas y otros aspectos, son definidas particularmente en cada caso y para cada lugar.
Para construir estas viviendas la madera se extrae, siempre que sea posible, sostenible y permitido, de la misma localidad en donde se está construyendo.
Las familias indígenas lograron obtener una casa financiada por la gestión directa de grupos organizados de la comunidad y con el concurso y apoyo de empresas constructoras que permitan cumplir con los estándares técnicos y sociales requeridos por la Fundación Costa Rica Canadá y el Sistema Financiero Nacional para la Vivienda.
Con adecuados procesos de diseño, logística y construcción, las casas en madera pueden tener un costo mucho menor, lo que las hace más accesibles económicamente para las familias vulnerables.
Jessica Martínez y Maribel Cruz recibieron una casa en el Territorio Indígena Tjai Cabecar, en Valle La Estrella, Limón; que les transformó la vida.
“Recibí esta casa hace dos meses. Antes vivíamos en una casa muy pequeña, ahora mi esposo mis dos hijos y yo tenemos más espacio”, comentó Jessica Martínez.
“Vivía con mi hermana y no tenía campo, ahora vivo con mi hija en esta casa con más campo”, indicó Maribel Cruz.
Históricamente, la Fundación ha sido gestora e impulsora del uso de la madera como sistema constructivo en todo el país, sobre todo, en poblaciones rurales. Cabe destacar que, además de financiar viviendas de madera, ofrece soluciones en concreto o con un sistema mixto entre ambos materiales. Si usted desea más información puede acercarse a la sede central en Lourdes de Montes de Oca, en San Pedro o llamando al 2207-8400 o al 2280-6922.