Melissa Solís Cordero / Periodista Periódico Mensaje
Aunque lleva sólo tres meses dirigiendo la Asociación Deportiva Gunacasteca (ADG), Luis Molina, nuevo director técnico, enfatizó que van a paso lento pero seguro, siempre con el objetivo de subir a primera división.
De origen venezolano, Molina llegó a asumir este puesto, luego de que se hiciera una selección de técnicos residentes en Estados Unidos; y gracias a su experiencia y años de servicio, fue elegido.
A sus 60 años, Molina ha dirigido al DWF Tornados FC de Estados Unidos, Tucanes de Amazonas FC en Venezuela, AC Mineros de Guayana y a la Selección Sub 15 Venezolana, entre otros.
Pero Molina no trabaja solo, sino de la mando de Ramiro Viales, un especialista en acondicionamiento físico, egresado de la Universidad de Missouri. “Vinimos a hacer el trabajo tratando de poner nuestro granito de arena, para hacer el cambio positivo del ADG”, indicó el venezolano.
Ambos se encontraron un equipo justo como se lo habían descrito, pero con ciertos aspectos por mejorar; siendo el principal, la alimentación de los jugadores.
“Un jugador que no está bien alimentado o que está alimentado de forma diferente a lo que se llama alto rendimiento, se le dificultará alcanzar el objetivo. Por lo que estamos trabajando en una dieta específica, basados en la voluntad de los jugadores, y así se irá percibiendo poco a poco los resultados”, dijo el entrenador.
En cuanto al entrenamiento, se trabaja con un sistema al estilo americano, con la esperanza de mejorar el rendimiento.
“Estamos apostando por un entrenamiento con mayor velocidad, movimiento y fuerza, al estilo americano, pero respetando la idiosincrasia de los jugadores. Desde ahora hacerles entender que es importante para llegar a competir con equipos del exterior”, aseguró Molina.
Además afirmó que una de las proyecciones después de pasar a primera división, será jugar partidos amistosos en Estados Unidos, a través de intercambios, e inclusive en Suramérica, gracias a su país de origen.
Otro de los puntos a trabajar es la mentalidad, la aspiración y ambición del equipo para que cumplan con los compromisos que tienen por alcanzar. “En cuanto al aspecto técnico hay mucho talento, sólo hay que depurarlo, porque muchos de ellos son menores”, expuso el entrenador.
Una de las deficiencias que encontraron los profesionales es la falta de patrocinadores para que los jugadores tengan un salario digno.
La respuesta de los jugadores de la ADG ante el cambio ha sido positiva, por lo que no se han presentado desacuerdos. “Mantenemos una buena armonía y amistad, siempre respetando los lineamientos profesionales, pese a que ya han pasado siete entrenadores antes de que yo llegara”, indicó Molina.