Los toreros y montadores, tanto profesionales como improvisados, deberán contar con una póliza contra riesgos que cubra los costos de su atención médica y de rehabilitación en caso de sufrir un accidente durante las corridas de toros de los festejos de fin y principio de año; así lo aseguró el licenciado Miguel Cordero García, director de la Dirección de Coberturas Especiales de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS).
Según explicó el licenciado Cordero, esta póliza debe ser extendida por el Instituto Nacional de Seguros y es requisito obligatorio para que las municipalidades autoricen la realización de eventos taurinos en sus cantones.
“Es fundamental que la póliza suscrita garantice la cobertura total de los gastos de atención y rehabilitación que puedan requerir los montadores y toreros. Por ejemplo, la atención de un paciente que sufrió un accidente taurino puede rondar, en un establecimiento de salud de la CCSS y según el caso, en ¢85 mil si es atendido en una clínica, mientras que en un hospital puede rondar desde los ¢900 mil y hasta los ¢5 millones si el paciente es hospitalizado”, aseguró el funcionario.
Cordero comentó que, durante los festejos del cantón central de San José realizados del 25 de diciembre de 2013 al 5 de enero de 2014, la CCSS invirtió en la atención de pacientes que sufrieron algún incidente dentro del redondel de toros de Zapote un aproximado de ¢24,5 millones de colones. Esto a partir de la información generada por el Área de Salud Zapote Catedral, la Clínica Carlos Durán y los hospitales Rafael Ángel Calderón Guardia y San Juan de Dios.
Mientras que para los festejos realizados del 25 de diciembre de 2014 al 4 de enero de 2015, la atención de estos pacientes requirió de un total de ¢16 millones de colones.
En Costa Rica la realización de este tipo de eventos está normada en el “Reglamento a las Actividades Taurinas”, aprobado mediante Decreto 34489-S-MSP-G y publicado en La Gaceta N° 85 del 5 de mayo de 2008.