- Este padecimiento es silencioso y puede afectar mental y físicamente a los menores a corto y largo plazo
La ansiedad no es exclusiva de los adultos y jóvenes, también los niños pueden sufrirla de manera física y psicológica, lo que afecta su calidad de vida, mencionó la Mtra. Aída Aceves Valencia en su taller-conferencia “Identificación de síntomas de ansiedad y depresión en niños, adolescentes y adultos”, durante el II Seminario de Actualización “El Cerebro en las Emociones y el Aprendizaje” que realizó la Universidad Autónoma de Guadalajara (UAG).
La experta, que cuenta con maestría en terapia infantil, es autora de libros sobre salud mental de niños, dio a conocer los síntomas comunes que este sector de la población puede mostrar al sufrir de ansiedad.
En el aspecto físico, un niño que sufre ansiedad puede mostrar:
- Dolor abdominal.
- Dolor de cabeza.
- Trastorno del control de esfínteres.
- Mayor frecuencia de rabieta y llanto.
- Cambios del apetito.
- Quejas físicas.
En lo cognitivo, el infante presenta:
- Verbalización o demostración frecuente de baja autoestima.
- Sentimientos de culpa.
- Dificultad para concentrarse.
- Disminución del rendimiento escolar.
- Ideas recurrentes sobre la muerte.
En la parte conductual, su comportamiento, se encuentran:
- Irritabilidad.
- Aislamiento de familia y amigos.
- Baja energía.
- Pérdida de interés.
- Sensación frecuente de aburrimiento.
- Negativa a comunicarse abiertamente.
- Alteraciones del sueño.
Para una intervención adecuada del niño que sufre estos síntomas, la experta recomendó empatizar con él, validar sus sentimientos y estado, mantener el control y generar un espacio seguro para él mismo.
Si el niño presenta estos síntomas debe tratarse en conjunto con un experto en el tema de la ansiedad en edad infantil, conocido como paidopsiquiatra, un especialista dedicado a la psiquiatría en niños y adolescentes.