• Acción extraordinaria: las niñas que el año pasado cumplieron diez años y que quedaron sin vacuna papiloma para evitar el cáncer de cérvix por la suspensión de clases durante la pandemia serán contactadas este año en el ámbito escolar.

Según datos del Registro Nacional de Tumores del Ministerio de Salud y del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos en Costa Rica el cáncer produce cerca de 11 500 nuevos diagnósticos cada año y lamentablemente fallecen 5 500 personas, ubicándose como la segunda causa de muerte, después de las enfermedades cardiovasculares.

En promedio puede decirse que 30 personas reciben cada día el diagnóstico de cáncer y pasan a una ruta de tratamiento que puede incluir cirugía, radioterapia, quimioterapia o alguna combinación de ellas.

El impacto del cáncer también puede notarse en el siguiente dato: el 45% de las muertes prematuras por enfermedades crónicas es por cáncer.

Los cánceres más comunes son distintos en hombres y mujeres. Los más frecuentes en cada uno de los sexos son los siguientes:

• De cada cien casos de hombres con cáncer 30 tienen de próstata, 12 de estómago, 11 de colon y recto, 11 de ganglios linfáticos, 4 de bronquios y pulmones, 4 vejiga y 4 testículo.
• De cada cien mujeres con cáncer 31 tienen de mama, 14 de tiroides, y 10 de colon y recto, 11 de cérvix y 6 de estómago.

En cuanto a mortalidad, con datos en números absolutos y sumando los hombres y las mujeres, el cáncer gástrico es la primera causa de muerte por cáncer en nuestro país, a pesar de la disminución importante en incidencia y mortalidad.

Acción conjunta frente al cáncer.

“El sistema de salud público de Costa Rica es considerado uno de los mejores en el abordaje del cáncer en Latinoamérica y alcanzamos índices de sobrevida en cáncer de mama y cérvix comparados con los índices más altos del mundo. Esto es un reflejo del gran trabajo realizado desde la comunidad hasta los niveles más complejidad más altos, donde tenemos especialistas, equipamiento y medicamentos de gran capacidad resolutiva para darle oportunidad de vida a las personas” afirmó el gerente médico doctor Randall Álvarez Juárez.

El informe de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) y el Banco Mundial sobre el estado de la salud en América Latina reveló el éxito de Costa Rica en el índice de sobrevida entre los cánceres con más mortalidad en la región en un estudio llamado “Panorama de la Salud: Latinoamérica y el Caribe 2020”. Entre los resultados más destacados están los siguientes:

• Cáncer de mama: líder mundial. Costa Rica tiene la supervivencia neta más alta del mundo a cinco años entre mujeres en cáncer de mama (86,7%) y es el único país de Latinoamérica que supera el promedio de la OCDE de (84,8%) y muy arriba del promedio latinoamericano (78.4%).
• Cáncer de Cérvix: líder latinoamericano. El promedio latinoamericano de cáncer de cuello uterino es 59.5%.  Costa Rica alcanza un 78%, el porcentaje más alto de Latinoamérica. Cuba (72.9%) y Brasil (59%) también destacan entre los países por encima del promedio.
• Cáncer de colón: segundo en Latinoamérica. El promedio latinoamericano en sobrevida de cáncer de colon es 51.7%.  Costa Rica está entre las más altas en la región (60,1%), y un poco menor al promedio de la OCDE de (62,1%).
• Cáncer rectal: segundo en Latinoamérica. El promedio en cáncer rectal es 60.6% en la OCDE y 45.8% en Latinoamérica. Entre esos dos promedios; es decir, por encima del promedio latinoamericano están Perú (54.8%), Costa Rica (53.9%), Uruguay (50.1%) y Argentina (49.9%).

La Organización Mundial de la Salud sostiene que uno de cada tres cánceres puede evitarse con hábitos saludables, entre los que está mantenerse delgado y con actividad física a lo largo de la vida, evitar el consumo excesivo de alcohol, de carnes rojas, especialmente las procesadas, vacunarse contra el virus papiloma y tener un buen manejo del estrés y, en general, llevar una vida mental saludable.

La vacuna papiloma evita el desarrollo del cáncer de cérvix. En Costa Rica se aplica a las niñas cuando cumplen diez años en el escenario escolar. La inmunización consiste en aplicar dos dosis, con un periodo de seis meses entre ellas.

El año pasado la cobertura de la vacuna papiloma fue baja. Al final de año se registró un porcentaje en la primera dosis de 55.3% y en la segunda dosis el porcentaje fue de 42.1%.

Para recuperar esa baja cobertura y como acción extraordinaria en pandemia, la Caja anuncia que las niñas sin vacunarse el año pasado, que era el año en que les tocaba pues cumplían diez años, serán abordadas este año en las escuelas para aplicarles la vacuna. No queremos dejar ese año con baja cobertura y vamos a hacer un esfuerzo por ellas”

Esto quiere decir que este año se vacunarán las niñas que este año cumplen diez años más el grupo las que el año pasado se quedaron sin vacuna porque las escuelas estuvieron cerradas de clases presenciales.

Este esfuerzo especial se realizará porque la vacunación de las niñas de diez años forma parte de la estrategia nacional del país para reducir la mortalidad de cáncer de cérvix y también forma parte de los compromisos internacionales para eliminar el cáncer de cérvix como un problema de salud pública en un punto entre el 2030 y 2050.

La inmunización del virus papiloma es un ejemplo de la importancia de la responsabilidad compartida: los servicios se salud se preparan para la detección oportuna y la atención temprana para dar mayor oportunidad de vida y, por su parte, las personas abrazan una vida de hábitos saludables para bajar el riesgo.
 

El impacto del cáncer en Costa Rica

Con base en el estudio “Situación epidemiológica del cáncer” del doctor Dr. Alejandro Calderón Céspedes del “Proyecto de fortalecimiento de la atención del cáncer” se revela el impacto del cáncer en el país.

En Costa Rica se ha definido como cáncer prioritario a 7 sitios tumorales, dada su alta incidencia y mortalidad en los últimos años, estos son cáncer de piel, gástrico, mama, próstata, cérvix, pulmón y colon.

En el siguiente cuadro se presentan el número de casos nuevos por cada tipo de cáncer en hombres y mujeres con base en los datos del Registro Nacional de Tumores más recientes que corresponden al 2016 y cuánto aumenta o disminuye desde el año 2000.

Entre los cánceres con más impacto estan los que tienen exámenes para facilitar la detección temprana, lo cual eleva las posibilidades de sobrevida.

• En cáncer de piel tipo melanoma –donde uno de cada dos fallece- las personas pueden revisarse los lunares y comentarle la evolución al médico, sobre todo si son disparejos entre sus mitades, de colores distintos, de borde irregular, si son mayores al tamaño de un borrador de lápiz común y si han cambiado en los últimos meses.
• En cáncer de estómago se recomienda el control de la infección de la bacteria helicobácter pylori que está asociada al desarrollo de este tipo de tumor.
• En colon y recto se recomienda la detección y el seguimiento de los pólipos o crecimientos en la pared del tracto digestivo bajo y que con el tiempo pueden volverse cancerígenos. En este caso se detectan por examen de sangre oculta en heces.
• En cáncer de mama se usa la mamografía, especialmente cada dos años en mujeres mayores de 45 años y menores de 70 años para encontrar lesiones que todavía no se sienten, se ven o se tocan.
• En cáncer de próstata se recomienda hablar con el médico para establecer el riesgo después de los cincuenta años y saber si se proceden a algunos exámenes como el antígeno prostático en sangre que, cuando es mayor a tres es signo de riesgo, y que va acompañado del tacto rectal.
• En cáncer de cérvix se recomienda el Papanicolaou cada año.