- La metástasis al sistema nervioso central es una de las complicaciones más frecuentes del cáncer, señaló especialista del Centro de Radiocirugía Robótica.
- Los tumores primarios; es decir, los que nacen directamente en el cerebro pueden tener una afectación dependiendo del lugar del cerebro donde se ubique, esto en la movilidad, emociones, o pensamientos del paciente.
El 40% de los pacientes con cáncer podrían desarrollar metástasis hacia su sistema nervioso central en algún momento de su enfermedad; es decir, un tumor maligno secundario en esa zona del cuerpo.
Así lo resaltó el Dr. Alejandro Blanco, especialista en Oncología Radioterápica del Centro de Radiocirugía Robótica, quien explicó que la metástasis al sistema nervioso central es precisamente una de las complicaciones más frecuentes del cáncer.
El especialista explicó que, la metástasis al sistema nervioso central, se produce cuando un paciente tiene un tumor maligno o un cáncer en otras partes del cuerpo, pero ese tumor, envía células malignas al sistema nervioso central mediante el torrente sanguíneo, mayoritariamente. Esas células, al llegar al tejido u órgano sano en esa área del cuerpo, empiezan a desarrollar nuevos tumores cancerosos o malignos.
Añadió que este es uno de los dos tipos de tumores que pueden afectar el sistema nervioso central. El segundo, que es menos frecuente que el generado por metástasis, es el tumor de cerebro primario. Este es el que nace propiamente en el tejido cerebral o medula espinal, o en los tejidos inmediatamente vecinos a estos. Estos tumores primarios, a su vez, se dividen en familias. Entre las que más destacan por su incidencia son los gliomas, los meningiomas –que son los tumores originados en una capa alrededor del cerebro–, y los tumores de la glándula hipófisis.
Específicamente, en cuanto a los tumores primarios (los que nacen directamente) en el cerebro, el Dr. Blanco hizo la aclaración de que estos tienen una incidencia baja. A nivel internacional entre 6 y 10 pacientes de cada 100 mil podrían sufrir tumores primarios en el cerebro.
Sin embargo, añadió el especialista, este tipo de tumor se vuelve muy importante debido a la morbilidad que produce. Esto son las molestias o secuelas que sufre el paciente en cuanto a afectación de su movilidad, habilidades de comunicación o afectación emocional.
“El cerebro es una computadora. Allí se regulan todas las funciones del cuerpo. Se regula estado de ánimo, nuestra iniciativa, nuestra memoria de trabajo, todo lo que sea movimientos del cuerpo, el proceso de pensamiento, los recuerdos; es decir la esencia del ser humano se regula en el cerebro. Cuando hay algo extraño en este órgano, estas conexiones eléctricas dejan de funcionar adecuadamente. Dependiendo de la parte del cerebro donde se desarrolle el tumor, así van a ser las molestias”, explicó el Dr. Blanco.
Añadió que, por ejemplo, si el tumor se desarrolla en una parte del cerebro encargada de la función motora, como mover el brazo derecho, va a haber una perdida en esa función. Pero si el tumor se desarrolla en un sitio donde el cerebro realiza la coordinación del lenguaje, lo que se verá afectado es el lenguaje. Así sucesivamente.
Diagnóstico de tumores en el sistema nervioso central
El Dr. Blanco comentó que la clave para el tratamiento de los tumores en el cerebro es un diagnóstico temprano. NO obstante, el problema de este tipo de tumores, es que los síntomas tempranos, a veces, no se asocian con una enfermedad tan pequeña. Lo otro que hay que entender, afirmó, es que cuando se habla de tumores en el sistema nervioso central, esta es una enfermedad muy diversa, ya que existen 150 tipos de tumores cerebrales.
A pesar de ello, para lograr un diagnóstico temprano, el médico dijo que lo primero es que todas las personas tienen que tener un control de acuerdo con su edad y factores de riesgo. Asimismo, se debería evitar todos aquellos factores perjudiciales para la salud, como fumar, tomar, estrés, dormir poco, obesidad, y mala alimentación.
“También hay que estar atentos a los cambios que podamos tener. Este último punto requiere una gran cooperación del paciente, pero también de la familia. A veces un paciente no se entera de esos cambios motores o emocionales, hasta que un familiar se lo dice. Tenemos que ser persistentes en cuanto a las molestias que van a apareciendo y buscar ayuda. Es decir, cuando una persona sufre algo nuevo, que no es común en esa persona, se debe consultar lo más pronto posible y de forma oportuna. Solo así se podrá tener un alcance rápido a los estudios de diagnóstico”, mencionó el radio-oncólogo del Centro de Radiocirugía Robótica.
En cuanto a afectación por paciente, los tumores primarios que nacen directamente dentro del cerebro (gliomas) son más comunes entre los adultos mayores sin importar su género. Otros tumores como los meningiomas, son más frecuentes en mujeres después de los 40 años. Por su parte, los tumores de hipófisis, dependiendo del tipo, también son más frecuentes en mujeres.
Tratamientos
En cuanto a los posibles tratamientos contra los tumores en el sistema nervioso central, el Dr. Blanco afirmó que este empieza con tener un mejor paciente que se auto-cuida. Además, se debe buscar generar un diagnóstico lo más certero posible utilizando técnicas como tomografía computada y resonancia magnética.
Una vez que ya han ocurrido estos pasos, es muy importante la discusión entre un grupo de especialistas como radio-oncólogos, neurocirujanos y oncólogos médicos, entre otros profesionales. Este consejo médico es quien recomendará el camino o tratamiento que deberá seguir el paciente.
“En muchos casos, siempre dependiendo del diagnóstico, ese camino empieza con una cirugía. Con ella se extrae el tumor que es analizado por los patólogos quienes brindan un diagnóstico exacto de qué tipo de tumor tiene ese paciente. Con esa información, se define si es necesario tratamientos de refuerzo”, señaló el Dr. Blanco.
Dentro de los tratamientos de refuerzo más comunes es la utilización de radiaciones. Estas pueden ser entregadas de varias maneras, como la radiocirugía robótica. Las radiaciones consisten en entregar energía a una parte muy específica del cuerpo. Esta energía puede ser entregada en dosis muy pequeñas diariamente de forma fraccionada, o una dosis mayor con mucha precisión en pocas sesiones. Esta última es la que se conoce como radiocirugía robótica. Las radiaciones, dependiendo de cada situación específica del paciente, pueden ser un tratamiento de refuerzo a la cirugía, o, en algunas situaciones, podría ser un tratamiento único y definitivo de una enfermedad. Para su uso, se discute cada uno de los casos en un grupo conformado por especialistas para tomar la mejor decisión de tratamiento.
En el país, la radiocirugía robótica se empezó a aplicar con la llegada del Centro de Radiocirugía Robóticahace tres años. Esta técnica, aunque utiliza el término de cirugía, no implica realizar ningún corte, uso de bisturí o cirugía. Es decir, este es un tratamiento mínimamente invasivo y totalmente ambulatorio.
El Dr. Blanco añadió que, en otras ocasiones, las radiaciones se vuelven en la primera acción del tratamiento. Esto, comentó, se da cuando el tumor no se puede operar.
“Hoy en día existen una gran gama de tratamientos para los tumores de cerebro. Lo más importante es que estos pacientes sepan que hay opciones. Que muchas veces esas opciones van ir en forma de una escalera en donde se iniciará con una y se irán incorporando las siguientes. En otras ocasiones, con un solo tratamiento será suficiente”, concluyó el Dr. Blanco, médico especialista en oncología radioterápica del Centro de Radiocirugía Robótica.