El último informe de la Comisión Nacional de Prevención de Riesgos y Atención de Emergencias (CNE), da cuenta que a la fecha se han invertido ¢2.955 millones para atender los efectos ocasionados por el huracán Otto en nuestro país.
De ese dinero, casi ¢2 mil millones corresponden a la CNE y lo demás a las otras instituciones que han participado en las diferentes etapas de la atención, incluyendo también, los gastos operativos.
De acuerdo con este reporte, la CNE ha invertido en las zonas afectadas ¢1.974 millones que se desglosan de la siguiente manera:
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¢230 millones utilizados en compras por créditos (que permitió realizar a los alcaldes de las zonas afectas compras de emergencia).
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¢1.034 millones para atención de primeros impactos (limpieza y canalización de ríos; construcción de obras de protección en las márgenes de los ríos, apilado material; rehabilitación de caminos y habilitación de rellenos de aproximación de puentes o vados; extracción de materiales para re-lastreo y que los caminos afectados sean transitables; limpieza de derrumbes y deslizamientos que incomunicaban comunidades y estabilización de taludes).
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¢994 millones en materiales y suministros varios para atención de la emergencia
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¢615 millones en gastos de operación
Otro rubro importante es el del Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados (AYA), esta institución registra una inversión que ronda los ¢104 millones, dinero invertido en el restableciendo de este servicio básico en las comunidades impactadas. En el caso del Ministerio de Salud la cifra llega a los ¢70 millones y en el PANI es de ¢25 millones para la atención a las personas menores de edad.
El trabajo en las comunidades apenas comienza, ahora se está a la espera de la elaboración del plan general de inversión que podría estar listo en unas cuantas semanas.
